Los inversionistas dejan de lado momentáneamente los temores en torno a los rebrotes del coronavirus -tras dejar atrás las cuarentenas- y se inclinan por las compras ante los planes de estímulo de las mayores economías del mundo y otros buenos datos macro.
Wall Street, el mayor mercado del mundo anotó su tercera alza consecutiva. El promedio Dow Jones escaló un 2,04%, mientras que el S&P 500 subió 1,90%. Mientras, el Nasdaq de acciones tecnológicas creció 1,75% y está cerca de nuevos máximos históricos.
Chile también se unió a la fiesta y el IPSA anotó un salto de 1,20%.
Las acciones europeas agrupadas en el Euro Stoxx 50, por su parte, anotaron un fuerte salto de 3,39%. El Dax de Fráncfort, la plaza más importante de la región, subió 3,39%, empujado además por la mejora que mostró la confianza de los inversionistas en la economía alemana.
Las ganancias en el viejo continente venían precedidas de los potentes avances en Asia. Las bolsas chinas subieron 1,44%, mientras que el Hang Seng de la Bolsa de Hong Kong cerró con un importante avance de 2,39%.
Pero las compras se desataron en el mayor merado de esa región: Tokio. El índice Nikkei se disparó 4,88%, en tanto que el Topix avanzó 4,09%. Esto luego que el Banco de Japón prometiera ayudas por US$ 1 billón a las firmas en problemas debido a la pandemia. Además, el emisor mantuvo sus objetivos de control de la curva de rendimiento en un -0,1% para los tipos de interés a corto plazo y en el 0% para los tipos a largo plazo.
Pilaras del alza
Las compras en los mercados descansan además en las declaraciones de la Reserva Federal, que iniciará la compra de bonos empresariales individuales bajo su programa de línea de crédito corporativo del mercado secundario. Hasta ahora solamente compraba fondos cotizados de deuda.
A esto se suman las expectativas por el eventual anuncio de Donald Trump de un plan de estímulo por US$ 1 billón en materia de infraestructura.
Y como si todo esto fuera poco, hoy se reveló el dato de as ventas del retail en EEUU, las cuales experimentaron su mayor salto de toda la historia en mayo, en lo que se interpreta como otra señal de recuperación económica.