El crecimiento de la actividad económica de enero estuvo justo en la mitad de las expectativas que tenían los economistas, que iban entre 1,5% y 3,8%. Según informó el Banco Central, el Imacec del primer mes del año fue de 2,5%.
Para este mes también se esperaba que el comercio impulsara el crecimiento de la actividad económica. Y así fue: en enero este sector creció 8,4% anual y 3,4% en comparación a diciembre.
En el detalle de esta cifra, el Banco Central destacó la contribución del comercio mayorista y minorista. El primero fue impulsado por las ventas de alimentos, en particular, por las exportaciones de frutas, donde tuvieron un rol protagónico los envíos de cerezas.
Iván Marambio, presidente de Frutas de Chile, comentó el aporte de las cerezas al crecimiento de enero. “Durante enero, de acuerdo a estadísticas de Frutas de Chile, se enviaron al mundo más de 320 mil toneladas de frutas frescas, dentro de las cuales el 25% fueron cerezas, que corresponden a más de 81 mil toneladas”. En ese sentido, Marambio dijo que, en montos, “las cerezas reportan exportaciones por US$2.278 millones, mayor a los US$1.886 millones de enero de 2024. Todo esto significa que nuestro sector sigue creciendo”.
En el comercio minorista, en tanto, destacaron las ventas realizadas en supermercados, establecimientos especializados de vestuario y grandes tiendas. También el comercio automotor registró mayores ventas de vehículos.
De acuerdo a un análisis de banco Santander, el comercio mayorista se vio nuevamente beneficiado por las exportaciones de cerezas, mientras que el minorista estaría influenciado por el consumo de los turistas argentinos.
Una visión similar tiene Scotiabank: “La contribución del turismo estaría siendo relevante, especialmente debido al gran número de turistas argentinos que visitaron el país esta temporada. De hecho, en enero ingresaron 518 mil turistas argentinos, los que según cifras de la Cámara de Comercio de Santiago consumen principalmente artículos electrónicos y de vestuario”.
Otro de los sectores que aportó al alza fueron los servicios, que aumentaron 1% en términos anuales, resultado que se explicó por los servicios personales y el transporte. “Las cifras ajustadas por estacionalidad mostraron un crecimiento de 1,0% respecto del mes anterior, impulsado por los servicios empresariales y personales”, dijo el Banco Central.
El ente rector detalló además que la producción de bienes creció 2,3% en términos anuales, resultado que fue explicado por la industria, en particular por el desempeño de la elaboración de alimentos. Por su parte, el resto de bienes también contribuyó al crecimiento de la actividad, mientras que la minería cayó por una menor extracción de cobre.
En Coopeuch sostienen que “si bien se anticipaba un fuerte dinamismo del comercio, explicado por las compras de turistas argentinos, las cifras de enero muestran un dinamismo importante en otros sectores como los servicios y la manufactura. Particularmente, el crecimiento mensual desestacionalizado de los servicios, que estuvo impulsado en parte por los servicios empresariales, lo que podría estar relacionado con una mayor demanda en proyectos de inversión en minería. Este impulso podría mantenerse en los próximos meses”.
Desde el gobierno, el ministro de Hacienda, Mario Marcel, valoró la cifra: “El año económico está empezando con el pie derecho, con buenos datos que, de mantenerse e incluso de moderarse, apuntan a una economía que va a tener este año un desempeño igual o superior en algunas dimensiones a lo que fue el 2024″.
Un magro segundo mes
No obstante este resultado, los economistas empezaron a advertir que el buen inicio de año podría revertirse en febrero, ya que los factores que impulsaron el crecimiento en enero son transitorios. Al respecto, banco Santander sostuvo que en los últimos dos meses “el fuerte dinamismo de los sectores no mineros ha sido empujado por factores transitorios, como las cerezas y el turismo, cuyo efecto debiese deshacerse durante marzo”.
Pero además de aquello, este febrero hubo un día menos en relación al de 2024, que fue año bisiesto. Eso fue señalado por el propio ministro Marcel, quien anticipó que el Imacec del segundo mes de año se verá afectado por ese hecho. “En este caso, como es un día entero que no va a estar, entonces esa es una diferencia de 3% no de 0,5% (estimación para los días feriados) u otra cifra. Entonces, ahí va a ser importante que miremos la variación en el Imacec desestacionalizado, que es el que limpia por este tipo de factores”, alertó Marcel.
Y como tercer factor que incidiría en un peor desempeño de la actividad en febrero está el impacto del corte de luz masivo que afectó a casi todo el país la semana pasada. La estimación realizada por Hacienda prevé un efecto negativo de entre 0,2% y 0,5% en el Imacec.
Con todo ello, los analistas prevén una expansión muy acotada de la economía en febrero, y algunos, incluso, hasta una caída. Es el caso de los expertos de Scotiabank, que plantean: “Debemos advertir que el efecto del año bisiesto, en conjunto con el corte de electricidad, llevarían a una contracción interanual de la actividad en febrero, lo que dada su naturaleza estadística y transitoria no cambia el diagnóstico macro”. Así, su proyección para el Imacec va entre 0% y -1%.
En tanto, Valentina Apablaza, economista del OCEC-UDP, afirma que “en un escenario más bien optimista, el Imacec de febrero podría presentar un crecimiento nulo respecto a febrero de 2024, sin embargo, es altamente probable que nos sorprenda con una contracción de la actividad económica en términos anuales”. Mientras que Carlos Smith, docente del CIES-UDD, estima que “el Imacec anualizado de febrero va a estar cercano al 0%”.
Un poco más optimista está Clapes UC, quienes preliminarmente y considerando el efecto del corte de luz proyectan un Imacec de entre 0,5% y 1%. Rodrigo Montero, decano de la facultad de Administración y Negocios de la U. Autónoma, espera un alza de 1,5%.
En Coopeuch, por su parte, prevén que el Imacec de febrero se ubique en 1%, “lo que refleja una moderación explicada en parte por la interrupción a nivel nacional del suministro eléctrico, y una base de comparación más exigente dado que 2024 fue un año bisiesto”, indican.
De esta manera, para el primer trimestre los economistas esperan un crecimiento del PIB entre 1,5% y 2%, mientras que, para el año, los pronósticos se mantienen en el rango que proyectó el Banco Central: de 1,5% a 2,5%.
