AES Andes cerró con pérdidas el 2023, afectada por resultados tanto en Chile como Argentina
La disminución en el margen de los contratos con clientes regulados y libres, así como mayores costos de seguros y gastos en desarrollo de proyectos solares y de hidrógeno, afectaron los resultados de la generadora en el país. Así, Chile pasó de representar el 66% del Ebitda de la firma en 2022, al 57% en 2023. En tanto, la operación en Colombia reportó ingresos positivos para la firma de capitales estadounidenses.
Los menores ingresos y mayores costos operativos registrados en 2023 en Chile, lastraron los resultados de AES Andes, filial que consolida las operaciones de la generadora eléctrica de capitales norteamericanos AES Corp, en Colombia, Argentina y nuestro país. Según informó a la Comisión para el Mercado Financiero (CMF), durante el ejercicio registró pérdidas por US$136 millones, cifra que se compara negativamente con los US$312 millones obtenidos en 2022.
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El resultado se explica principalmente por las pérdidas netas registradas en Chile, que llegaron a los US$250 millones, que también se comparan negativamente con los resultados vistos el año anterior, cuando la operación en el país le reportó ganancias por US$165 millones. El desempeño se explicó por una disminución en el margen de los contratos que la generadora tiene tanto con clientes regulados como con los denominados libres. En concreto, los ingresos relacionados a ambos ítems se hundieron un 21%, hasta los US$379 millones en el caso de los primeros, y un 8%, hasta los US$ 1.016 millones, en los segundos. Lo anterior se vio compensado por un alza de 25% en las ventas spot, que totalizaron US$432 millones, y el aumento en un 14% en ingresos por transmisión, que sumaron US$93 millones. Con todo, los ingresos ordinarios se redujeron un 6%, hasta los US$1.936 millones.
Así, el Ebitda (resultados antes de intereses, impuestos, depreciaciones y amortizaciones) generado en Chile en 2023 llegó a los US$387 millones, un 28% menor a lo registrado entre enero y diciembre de 2022. Entre un año y otro, el país pasó de representar el 66% del Ebitda total de la firma, al 57%.
Según detalló en su análisis razonado, la merma responde a “una disminución en el margen de contratos regulados y no regulados asociada a la finalización de contratos con indexación de precio por combustible, mayores costos de seguros, tanto en plantas de carbón como de nuevas plantas de fuente renovable que entraron en operación en 2023, y mayores gastos de desarrollo en proyectos solares y de hidrógeno”.
El magro desempeño de AES Andes en el 2023 además se explicó por Argentina, país donde la última línea también cerró con número rojos: US$44 millones en pérdidas, explicadas principalmente por “el efecto del recupero de seguros reconocido en el año 2022 por US$17 millones”, especificó la compañía en el documento ingresado a la CMF.
Colombia marcó el contrapunto con los otros mercados donde participa AES Andes. En dicho país, la firma obtuvo ganancias por US$ 157 millones. El mejor desempeño estuvo influido por un mayor volumen de ventas en el mercado spot, especialmente durante el tercer trimestre, “aprovechando la flexibilidad del reservorio en un contexto de precios atractivos y producto de las mejores condiciones hidrológicas para AES Colombia durante el fenómeno del Niño en comparación con el resto del sistema SIN”, explicó la generadora.
Aumento en generación renovable
Pese al magro desempeño financiero obtenido en Chile, la operación de AES Andes mostró avances en la estrategia de transformación, denominada Greentegra. Lo anterior se tradujo en que la compañía logró un aumento en la energía generada preveniente de fuentes renovables. Así, mientras que la energía solar en 2023 subió 109% hasta los 496 GWh, la eólica lo hizo en un 28% hasta los 786 GWh, y la hidroeléctrica lo hizo en un 10% hasta los 731 GWh. En contrapartida, la generación neta en base a carbón retrocedió 5% y la biomasa lo hizo en 3%, hasta los 7.209 GWh y 30 GWh, respectivamente.
En Chile, AES Andes y sus filiales poseen 3.752 MW en capacidad instalada. De ellos, 1.921 MW son termoeléctricos -276 MW de Norgener, que se desconectará y cesará operaciones el próximo 31 de marzo- , 771 MW hidroeléctricos, 370 MW eólicos, 442 MW solares fotovoltaicos, 13 MW de biomasa y 236 MW de sistemas de almacenamiento de energía en baterías.
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