Las cosas para Albemarle en Chile no están fáciles. Al rechazo a la solicitud de aumento de cuota de producción de litio que hace pocas semanas le comunicó la Comisión Chilena de Energía Nuclear (CCHEN) y a la demanda anunciada por la Corporación de Fomento de la Producción (Corfo) por el eventual incumplimiento de un contrato, ahora se sumó un nuevo problema.
Esto, luego que por falta de información, el Servicio de Evaluación Ambiental (SEA) de Antofagasta decidiera poner término anticipado al procedimiento de evaluación de impacto ambiental del proyecto "Planta de Carbonato de Litio Mejillones", el que había sido ingresado a tramitación hace dos meses y que consideraba una inversión que supera los US$538 millones para la construcción de las plantas 5 y 6 de la compañía en Chile.
Todo eso, casi una semana después de que el gerente general de la firma, Luke Kissam, anunciara que la compañía decidió frenar sus planes de expansión de producción en Chile y en específico detener los trabajos de ingeniería para el proyecto de expansión de carbonato de litio precisamente a través de las plantas 5 y 6.
"Albemarle decidió acelerar el desarrollo de su proyecto de hidróxido de litio en Australia y poner en espera los estudios de ingeniería de su futuro proyecto, "Planta Carbonato de Litio Mejillones", que estaba en tramitación ambiental.
En este escenario se están analizando las observaciones realizadas por el SEA de la Región de Antofagasta, tras lo cual se tomarán las decisiones necesarias. Reiteramos el compromiso de Albemarle, como empresa líder mundial en la producción de litio, con Chile y la Región de Antofagasta", dijo ayer la firma.
Fuentes de la industria comentaron que si bien Albemarle ya había tomado la decisión de suspender el proyecto, el pronunciamiento de la autoridad ambiental afecta a la imagen de la compañia, toda vez que pierde un potencial activo, que en este caso habría sido el futuro permiso ambiental de la iniciativa.
La suspensión
A través de una resolución, la autoridad ambiental consideró que en la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) presentada por la empresa, estaba ausente información esencial del proyecto.
"El titular no presenta los antecedentes necesarios que permitan descartar que el proyecto genera efectos adversos significativos sobre la cantidad y calidad de los recursos naturales renovables, incluidos el suelo, agua y aire", dice el escrito del servicio público.
Asimismo, acusa que en la presentación de la iniciativa fue omitida información clave, relacionada con la presencia de nidos de la especie sterna lorata (gaviotín chico) en el área de influencia.
"Aún cuando el área de influencia del proyecto no se encuentra establecido como sitio de protección oficial de la especie Sterna lorata, dicha área corresponde a un sector que es utilizado como área de nidificación de la especie mencionada, y más aún ésta se encuentra protegida, en la categoría de 'en Peligro de Extinción'", dijo.
Cabe recordar que la iniciativa consistía en el desarrollo de una nueva planta para la producción de 42.500 toneladas al año de carbonato de litio.
"Para lograr la producción esperada se requiere aumentar la producción de 286.500 m3/año (actualmente autorizada) a 416.500 m3/año de salmuera concentrada de litio (6%), manteniendo la tasa de extracción de salmuera autorizada de 442 L/s en el salar de Atacama.
Este aumento (130.000 m3/año) se logrará a partir del mejoramiento en la eficiencia del proceso de recuperación de litio en Planta Salar, del orden del 83,5% al 88,5%", señaló la firma en su DIA.