En conversación con Radio Duna, el economista y exsubsecretario de Hacienda, Alejandro Micco, se refirió a los traspasos desde Corfo al Ministerio de Hacienda en medio de un contexto de alto déficit fiscal.
El académico sostuvo que, aunque este traspaso no representa ninguna ilegalidad, el problema de fondo es que “Corfo se está utilizando para financiar un déficit fiscal que es muy alto, que ya lo dijo el Consejo Fiscal Autónomo, que es extraordinariamente alto para un año normal”.
“El gobierno está gastando más de los ingresos que está teniendo. Y esto es algo que no es solamente de este año o del año pasado. Desde hace más de una década que estamos en esta situación”, sostuvo el economista.
En ese sentido, Micco afirmó que “para financiar este déficit que es alto, como país, estamos teniendo que recurrir a fuentes de financiamiento que no son las normales para financiar un déficit fiscal corriente. Ya no estamos pudiendo ir primero a nuestros ahorros”.
En esa línea, el economista aseguró que “ya como país nos comimos todos los ahorros que tuvimos en algún momento”, señalando que ya no nos quedan montos soberanos a los que recurrir.
Por tanto, según el exsubsecretario, el gobierno ha tenido que recurrir a un segundo canal que es la deuda para financiar el déficit, “y vemos que también estamos estrechos por ese lado, que ya estamos llegando a los límites superiores de endeudamiento”, señaló
“Por lo tanto, los dos canales más naturales para financiar el déficit fiscal (...) estaban copados. Ya no quedaban esas holguras para poder financiarnos”, agregó.
En este escenario, el académico afirmó que el gobierno tuvo que recurrir a otros activos que se pudieran liquidar, “tuvimos que un poco ir al raspado de la olla de varias instituciones para poder financiar esto”.
De igual manera, Micco recalcó que “si queremos seguir siendo un país serio en lo fiscal, vamos a tener que hacer el ajuste”.
Por tanto, el economista afirmó que “al gobierno actual le va a tocar quizás la peor parte que va a ser hacer un ajuste importante forzado por las circunstancias. No como algo que se quiera hacer, como algo de política, que desde el comienzo se planteó (...) y más encima durante un año electoral”.