De economía, emprendimiento, arte, educación y filantropía. Esos fueron algunos de los temas que abordó el empresario Álvaro Saieh frente un grupo de alumnos de la Universidad del Desarrollo, en el marco del ciclo de charlas "Conociendo a emprendedores", que organiza dicha esa casa de estudios.
En más de una hora de conversación, el empresario contestó diversas preguntas formuladas por el director del Instituto de Emprendimiento de la UDD, Hernán Cheyre. Hoy, el grupo Saieh participa en el negocio financiero, a través de Itaú (en Chile y Colombia); supermercadista, con SMU; inmobiliario, con Vivocorp, y medios de comunicación, con Copesa, holding que edita PULSO.
La conversación comenzó refiriéndose a sus inicios como académico y economista, y cómo esto influyó su vida como empresario. "La formación de economista ayuda mucho a mirar la empresa desde un punto de vista global", explicó Saieh. Y agregó: "En todas las actividades en que estoy tengo un segundo que sabe administrar. A mí me gusta la planificación, la estrategia, pero alguien tiene que ir ordenando".
La filantropía y el arte
La familia Saieh ha desarrollado diversas iniciativas filantrópicas, siendo quizás la más conocida en Chile la fundación CorpArtes. ¿Qué lo motiva? "Nuestra familia viene de orígenes súper humildes. Yo nunca me voy a olvidar de donde vengo. La diferencia es que otros están resentidos, yo estoy súper contento. Y no creo que en la vida todo sea resultado del esfuerzo. Algunos hemos nacido parados, y a otra gente igual que yo, más inteligente que yo, más trabajadora que yo, no les ha ido bien. El esfuerzo es una condición necesaria, pero no suficiente", contó Álvaro Saieh ante un centenar de estudiantes.
En su caso, dijo, fue clave el rol que jugaron sus padres, que siempre lo apoyaron para que avanzara en sus estudios.
Su apuesta por CorpArtes nace de su interés por el arte, pero también por la educación. "La educación en Chile es decimonónica, y no hablo de las universidades, sino que de los primeros 12 años. Te enseñan a aprender sin entender el significado. En el arte hay una cosa que es fantástica, puedes ver la misma cosa desde cientos de puntos de vista", explica.
Y agrega: "Tenemos convenios con municipalidades, especialmente las más pobres, donde asumimos la tarea de explicarles cada exposición. Creemos que esos niños, con tres o cuatro exposiciones, van a ser distintos a los que nunca han tenido contacto con el arte. Nosotros hacemos esto muy enfocado en la educación y en los niños".
El "deber ser"
Para Álvaro Saieh hoy el país enfrenta un problema profundo, que afecta a toda la sociedad: "En Chile hay un fenómeno creciente que me lo advirtió hace 15 años el presidente de España, Felipe González, cuando fuimos a la Antártica. Ahí me dijo: 'ustedes van a tener un problema, porque quieren vivir con un nivel mayor que el ingreso que tienen. Y eso termina mal'".
A juicio de Saieh, el problema en Chile es que "el deber ser no existe".
"En Santiago, la gente bota papeles en la calle, las paredes están rayadas, ¿por qué lo hacen? No conocen su obligación. Así, la educación, la salud, no se van a arreglar nunca", dijo. A su modo de ver, es difícil que Chile logre avanzar a ser un país desarrollado "mientras no se trabaje a conciencia, con el deber ser".
Aquí, el empresario también se refirió a la importancia del crecimiento económico. "Cuando un país crece al 7% hay mucha plata. Cuando se crece al 1% ó 2%, no hay plata, y ahí empiezan los impuestos patrimoniales que obviamente hacen que el capital se arranque y no vuelva", añadió.
Industrias bajo amenaza
En la conversación, Álvaro Saieh destacó el interés de los jóvenes de hoy por emprender. Y ante una consulta de Cheyre, donde lo describió como "banquero por esencia", el empresario lo corrigió: "Yo no soy banquero por esencia, soy emprendedor por esencia".
Hoy, añadió, todas las industrias están amenazadas por el avance de la revolución digital y de la automatización de los procesos. Por eso, dijo, es necesario estar preparados para el cambio. "Si me pregunta si alguno de los sectores en que estamos está amenazado, la verdad es que están súper amenazados. El cambio en cada uno de ellos es tan violento, que no sabemos cómo van a ser en cinco años más".