La economista y académica de la Escuela de Gobierno de la Universidad Adolfo Ibáñez, Andrea Repetto, apuntó que es importante aprovechar el buen momento de la industria del litio y, por ende, esperar a tener una empresa estatal dedicada a su explotación podría jugar en contra de ese objetivo.
“Ayuda a traer más recursos a las arcas fiscales y tenemos que hacerlo rápido. Una empresa nacional del litio puede ser muy lento y la colaboración con los privados puede ser la manera más eficaz de hacerlo”, dijo Repetto en entrevista con Radio Pauta.
Sin embargo, la economista precisó que “el Estado tiene derecho a obtener una parte de esos recursos y hay distintas formas de hacerlo. Puede ser a través de una empresa, por cierto, pero también puede ser a través de estas concesiones, de royalty, contratos, etc.”.
Las declaraciones se dan en pleno debate en relación a si los ingresos provenientes del litio podrían financiar la Pensión Garantizada Universal (PGU). Respecto a esta idea, la economista señaló que “no estoy tan segura de que eso sea el mejor uso de los recursos hoy día”.
“Quizás se puede elevar en algún cierto monto, pero creo que llevarla al 100% de la población es simplemente incorporar a hombres de altos ingresos, que no son personas que de verdad estén apurados con la necesidad de una pensión más alta”, explicó.
Además, Repetto agregó que “los cálculos que se hacen sobre el costo de la PGU es cuánto cuesta hoy día, pero en 30 años más, con otra demografía, va a ser mucho más caro. Evidentemente el litio no es suficiente, y quizás los recursos se pueden usar para otras cosas”.
Rechazo de la reforma
Repetto también se refirió al rechazo del emblemático proyecto tributario del Gobierno de Gabriel Boric, señalando que “cuando el ministro (Mario Marcel) planteó inicialmente un pacto tributario, nunca se construyó realmente. Hay que ir a construir ese pacto”.
“A lo largo de la discusión también se aprendió que hay gente en la derecha que también está dispuesta a apoyar en elusión y en evasión. Yo creo que también hay que invitar a los empresarios a participar de esta discusión. Hay que hacer un trabajo pre legislativo quizá más amplio” agregó.
Esto, apuntando a que Chile necesita una recaudación más alta y, por lo tanto, una reforma tributaria, recordando que en la elección presidencial del 2021 “todos los candidatos y los precandidatos previos, incluso la derecha, excepto José Antonio Kast, estaban de acuerdo con que necesitamos más recaudación fiscal. Y lo necesitamos porque hay muchas demandas ciudadanas que son naturales con el desarrollo”.
“Tenemos una recaudación tributaria que ha permanecido más o menos estable en los últimos 30 años, tenemos una clase media creciente, más demandas por mejor salud, una salud más oportuna, una educación de calidad, y eso se hace en buena parte a través de recursos fiscales”, expuso Repetto.
Cuando fue consultada por las opiniones de otros economistas ligados a la oposición que discrepan en la necesidad de la reforma para financiar medidas como la Pensión Garantizada Universal (PGU), apuntó que “se dicen dos cosas que son bastante incompletas: una, que tenemos que crecer más, y con más crecimiento se tiene más recaudación. Y eso es una mirada limitada al problema, porque cuando hay más crecimiento, es cierto, hay más recaudación, pero también hay más gasto”.
“Cuando recaudamos más por la vía del crecimiento, también gastamos más. Eso no libera nuevos recursos para nuevos gastos”, explicó.
El segundo punto al que se refirió fue a la propuesta de ciertos sectores de aumentar los recursos cerrando programas fiscales ineficientes. “Uno mira la lista de programas mal evaluados. Primero, hay que pensar cuáles son las metodologías que se utilizan, y hay cuestionamientos al respecto. Segundo, ¿Qué significa ser mal evaluado? Se dice que no está bien focalizado, o porque no resuelve el problema, pero quizás requiere más recursos. No menos. Los programas están ahí por algún motivo”, comentó Repetto.
Por otro lado, se refirió a la propuesta de la Confederación de la Producción y del Comercio (CPC) que busca aumentar el impuesto corporativo como alternativa al impuesto al patrimonio que fue ampliamente criticado. “No es una buena idea subir los impuestos de primera categoría. Nosotros ya tenemos un impuesto que para estándares internacionales es relativamente alto”, indicó.