Alemania es uno de los países que más rápido ha avanzado en el hidrógeno verde y su experiencia, que será contada por el secretario del Estado del Ministerio Federal de Economia y Energía de Alemania, Andreas Feicht, será parte de las exposiciones del Summit de Hidrógeno Verde que se inicia este martes.
Feicht accedió a responder algunas consultas por escrito, previo a su exposición.
¿Cuáles son los objetivos de Alemania en torno al hidrógeno verde?
-Los principales objetivos de nuestra política energética son, como en muchos otros países, la seguridad del suministro, la asequibilidad y la compatibilidad medioambiental. Queremos sustituir los combustibles fósiles que estamos empleando en la actualidad, en especial las fuentes de energía gaseosas y líquidas, por opciones alternativas. Alemania considera que solo el hidrógeno producido a partir de fuentes de energía renovables (hidrógeno verde) es verdaderamente sustentable a largo plazo.
¿Qué países cree que tienen potencial para ser competitivos?
-Estamos evaluando el potencial para la producción de hidrógeno verde en todo el mundo. Desde la perspectiva de un comprador potencial, existen diversos factores a tener en cuenta: el más relevante de ellos es lograr producir de manera eficiente y rentable, lo cual depende del costo local de la producción de energía renovable. Pero también es importante tener en cuenta las opciones relativas a la distancia y el transporte. Chile es uno de los países que ofrecen el mayor potencial.
¿Es competitivo actualmente el hidrógeno verde?
-La producción de hidrógeno verde no resulta rentable todavía, y el hidrógeno verde tampoco constituye aún una alternativa competitiva a los combustibles fósiles. No obstante, para lograr rebajar los costos el gobierno alemán está fomentando también el desarrollo de plantas piloto y plantas a escala industrial dedicadas a la producción de hidrógeno verde. Asimismo, en estos momentos estamos estudiando prometedores proyectos de cooperación con Chile.
¿Qué clase de alianza podría darse con Chile?
-Con el tremendo potencial de Chile en el ámbito de las energías renovables y las actividades del gobierno para fomentar activamente la producción de hidrógeno verde en el país, así como su voluntad de cooperar intensamente con socios internacionales, consideramos que existe una base prometedora para el futuro de esta tecnología en Chile.