Sin Estados Unidos ni China, un selecto grupo de países fue convocado para reunirse el 24 y 25 de octubre en Quebec e intentar formular una propuesta conjunta para reformar a la Organización Mundial de Comercio. Sólo tres nacions latinoamericanas, entre ellas Chile, participarán del encuentro donde lo centrar será reformular la normativa actual del organismo, que no está dando el ancho para resolver los conflictos entre sus miembros, incluso antes de que se desatara la guerra comercial.

La idea de agruparse entre países afines para avanzar en la materia, surgió luego de la mini-ministeral de la OMC el pasado 31 de mayo, en el marco de la cumbre de la OCDE en París, cuando el presidente de Francia, Emmanuel Macron, subrayó la necesidad de una "refundación del multilateralismo liberal y comercial".

La posta de esta gran misión la tomó el ministro de comercio internacional de Canadá, François-Philippe Champagne, quien se encargó de organizar la reunión de octubre. Para eso se comunicó con representantes de 12 países, incluyendo a Iván Favereau, miembro de la Misión chilena en la OMC.

La lista la completan: Australia, Brasil, Corea del Sur, Japón, Kenia, México, Nueva Zelandia, Noruega, Singapur, Suecia y la Unión Europea.

Objetivos de la reunión

Según la misiva que recibió la Direcon, Champagne indicó a Favereau que la idea "es poder contar con la presencia de los Ministros de Comercio de un grupo pequeño pero influyente de países likeminded que permita, eventualmente elaborar ideas y propuestas para abordar la situación de crisis que vive el multilateralismo comercial y ser presentadas, posteriormente, a los demás miembros de la OMC".

La invitación fue bienvenida por las autoridades locales, a quienes les preocupan los crecientes conflictos comerciales entre los socios más importantes de Chile. "Hoy día, con esta presión proteccionista creciente, claramente tener una OMC con tantos temas pendiente no es sostenible", señaló a PULSO Rodrigo Yáñez, director general de la Direcon.

En ese marco, detalla que lo que Canadá está planteando hacer que se debata sobre acciones inmediatas, para mejorar la eficiencia y la eficacia de la OMC; acciones de largo plazo, para que se convierta en un organismo del XXI; y acciones para salvaguardar y fortalecer el sistema de resolución de controversias.

Prioridades de Chile

Es justamente este último punto una de las principales preocupaciones a nivel nacional. "La OMC es un órgano de negociaciones, así se originó hace más de 20 años atrás, por lo tanto tenemos que volver a poner las negociaciones en marcha", indica Yáñez, refiriéndose puntualmente al órgano de apelaciones de la insittución, actualmente paralizado.

De todas maneras, subraya que hay que poner límites claros, para que "la solución de controversias no se convierta en la regulación de temas técnicos fuera del mandato que los miembros le han dado a la OMC". Adicionalmente, destaca que hay temas a mejorar en transparencia. "Mucho países imponen barreras al comercio que no notifican o lo hacen de manera tardía e incompleta (...) Eso debe enfrentarse de manera urgente", sostuvo Yáñez.