El ministro de Finanzas de Argentina, Luis Caputo, habría comunicado en reunión con los banqueros de su país que el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional está virtualmente cerrado. Las conversaciones, que concluirán el 15 de junio, darán como resultado una línea de crédito stand by de US$40.000 millones, más de lo esperado originalmente, según detalló en un informe el renombrado periodista del Clarín y Radio Mitre, Marcelo Bonelli.

"Los montos no serán girados al Banco Central de la República Argentina sino al Tesoro Nacional. Y se alargará los plazos de las Lebac en una operación financiera que será voluntaria de los bancos", detalla Bonelli en su sitio web.

En la misma jornada, el jefe de gabinete Marcos Peña señaló en una conferencia en Londres, en el centro de estudios Chatham House, que el plan que se acordará con el FMI "será completa responsabilidad del gobierno argentino", reafirmando que podrán cumplir sin problemas con la meta de déficit fiscal, que según trascendidos quedaría establecida en 2,5%.