El asesor económico de la Casa Blanca, Larry Kudlow, dijo este miércoles que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, no exige un cambio de política monetaria en la Reserva Federal tras sus nuevas críticas contra el banco central y calificó las alzas de las tasas de interés como "su mayor amenaza".

En lo que ha surgido como un patrón recientemente, el funcionario gubernamental trató de mitigar las inusuales críticas presidenciales a la Fed y aseguró que, en gran medida, Trump en realidad concuerda con el banco central estadounidense.

"No está interfiriendo con su independencia", declaró Kudlow en Fox Business Network, el mismo canal de televisión usado por Trump el martes. "No va a ir allí para decirles que cambien sus planes o su estrategia", agregó.

Aunque la Fed es independiente políticamente y sus integrantes han señalado de manera casi uniforme que pretenden seguir endureciendo la política monetaria ante un empleo históricamente bajo y señales de una aceleración de la inflación, algunos economistas han advertido que el hostigamiento de Trump podría afectar su legitimidad.

El banco central estadounidense ha optado por una política de alzas graduales de las tasas de interés que comenzaron lentamente a fines de 2015 y el mercado prevé que vuelva a elevar los tipos en diciembre y el próximo año.

Más tarde el miércoles la Fed divulgará las minutas de su reunión de política monetaria de septiembre, en que incrementó las tasas a entre un 2% y un 2,25%.

La semana pasada, Trump criticó a la Fed dos veces y dijo que estaba restringiendo el crédito tan rápidamente que amenazaba a la salud económica del país. El mandatario ha calificado a la Fed de "loca", "ridícula" y "demasiado linda".

Expresidentes estadounidenses han sido reticentes a criticar al organismo debido a que la independencia de la Fed es vista como importante para la estabilidad económica.

La Fed realiza decisiones de política monetaria en forma independiente, pero reporta regularmente al Congreso. Datos recientes han estado en línea con su presentación de una fuerte economía que tiene un pronóstico "notablemente positivo", afirmó Powell el 2 de octubre.