Reacciones negativas ha recibido la medida del gobierno de incrementar el Cargo por Servicio Público (CSP) a los grandes clientes eléctricos. Así fue el caso de Asimet, donde el presidente del gremio, Fernando García, calificó la situación como un balde de agua fría.
La medida viene de la mano con la decisión del gobierno por aumentar el número de subsidios para las tarifas eléctricas, con lo que García declaró que “no es justo pretender que los clientes libres, cuyas tarifas nunca fueron congeladas, tengan que pagar ahora parte del subsidio, generando un impacto adicional a los costos de producción”.
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García explicó que gran parte de las empresas metalúrgicas y metalmecánicas consumen más de 5.000 KW al mes, lo que supera la cifra que fijó el gobierno para que aporten al financiamiento del subsidio.
El dirigente sostuvo que las empresas industriales en Chile pagan un precio “considerablemente” más alto en electricidad, si se compara con el resto de los países de la región. “Esto va nuevamente a impactar la competitividad de un sector industrial que ya se encuentra estresado por mayores costos asociados a la actividad productiva”, acusó.
“Como sector manufacturero, hemos hecho un esfuerzo en los últimos años para descarbonizar nuestra actividad productiva, transformando nuestros procesos hacia la energía verde. Esta medida que plantea el gobierno claramente va en la dirección contraria a poder seguir avanzando en esta línea, que es, por lo demás, uno de los pilares que abraza la autoridad en el sentido de alcanzar una economía cada vez más verde y sustentable”, sostuvo García.
El dirigente indicó que subir las tarifas eléctricas podría ser lapidario para el sector industrial, el que además se viene ajustando a medidas como las 40 horas, el aumento del salario mínimo y la futura reforma previsional.
La propuesta de García es ampliar la duración del alza de las tarifas, y que, al igual que el tiempo que duraron congeladas, el descongelamiento se cumpla en un plazo de 5 años, y de manera gradual.
“En todo caso, lo que está viviendo Chile hoy en materia de tarifas eléctricas es la comprobación de que postergar la decisión de pago con subsidios o congelamientos de precios daña profundamente la macroeconomía de los países. Se debe permitir que las tarifas varíen de acuerdo con los precios reales de la energía, y si se subsidia, hay que hacerlo de manera focalizada, porque ya estamos siendo testigos de las graves consecuencias de subsidiar masivamente”, concluyó el dirigente.
