La Asociación de Isapres salió a responder los dichos del director de Fonasa, Camilo Cid, quien aseguró que la creación del Fondo Universal de Salud tiene como objetivo que las instituciones privadas de salud “desaparezcan del mapa de la seguridad social”.
En una declaración pública, la entidad gremial -que agrupa a las siete instituciones privadas de salud abiertas- entregó una dura advertencia sobre el futuro de la industria y el impacto que tendría su colapso.
“Medio millón de las personas que están en Isapres tienen diagnósticos de alto riesgo, oncológicos, crónicos o son pacientes de edad avanzada. En ellos, al igual que en el resto de los cotizantes que voluntariamente suscriben al sistema, como a sus familias e hijos, las declaraciones que anuncian un término del sistema generan profunda preocupación. El país está preparado para discutir una reforma de salud, pero no para que las Isapres cierren de golpe. En ese contexto, si bien hay consenso en el diagnóstico de los problemas que afectan al sistema y sobre la necesidad de abordarlos, es necesario que los cambios sean paulatinos y no gatillados por una crisis que tenga como punto de partida el término forzoso y abrupto del sistema Isapre”, plantea la asociación gremial.
En la declaración, remarcan la “situación crítica” que atraviesa la industria, y afirman que actualmente su operación “se sostienen únicamente por el aporte que hacen los grupos controladores, arriesgando un próximo desenlace abrupto”.
El texto también emplaza a la ministra de Salud, Begoña Yarza, a que se reúna con los representantes del gremio “para exponerle con claridad las complejas cifras del sector y los difíciles escenarios que se aproximan”.
En esa línea, transparentan que han solicitado reuniones con la titular del ramo, pero que tras habers sido aplazada en tres ocasiones “recién tendrá lugar el próximo 18 de agosto”
“Los plazos, sin duda, apremian. Y como gremio estamos al tanto de los múltiples desafíos que enfrenta el Ministerio de Salud, sin embargo, es necesario que se atienda la situación de los tres millones de afiliados que arriesgan a corto plazo perder su cobertura de salud, causando un traspaso masivo de personas al Fonasa, justo cuando hay más de dos millones de personas en lista de espera”, sostiene la asociación de Isapres.
El documento lo cierran enfatizando en que, a juicio de la instancia gremial, el foco “o debe estar puesto en desmantelar el sistema privado, sino en lograr que todas las personas tengan acceso a tratamientos y prestaciones de manera oportuna”.
“Sin embargo, lo que hemos visto hasta ahora son acciones tendientes a eliminar a las Isapres, en lugar de dar respuestas concretas a la demanda de la ciudadanía, que quiere soluciones a sus problemas de salud. Lo que uno esperaría es que, si se va a poner fin a algo en materia de salud, que sea a las listas de espera, a los problemas de falta de médicos, de eficiencia, insumos o infraestructura, que afectan diariamente a los chilenos”, concluye la declaración.