El porcentaje de personas que esperan comprar una vivienda en un plazo máximo de un año aumentó un 55% en los primeros meses de este año, según detectó una encuesta de Enlace Inmobiliario.
De acuerdo a la encuesta, para la cual fueron consultadas alrededor de 1.900 personas, este último indicador fue impulsado principalmente por las personas que pretenden concretar la compra de una vivienda en menos de seis meses, los que crecieron significativamente desde el 9% en 2021 a un 19% en lo que va de este 2022. Por el contrario, los que barajaban la opción de compra a un plazo de dos años o más -y que se ubicaban en un 19%- disminuyeron a sólo un 8% en el mismo periodo.
Según Sergio Barros, director ejecutivo de Enlace Inmobiliario, entre las razones que estarían influyendo en la decisión de comprar una vivienda en un menor plazo está el factor del aumento de precios. “De acuerdo a la percepción de los encuestados, en su mayoría estiman que durante los próximos meses las viviendas incrementarán sus valores. Además, el aumento de las tasas de interés puede acelerar la decisión de compra entre quienes están decididos a comprar prontamente”, aseguró.
“Si bien los cotizantes perciben hoy una mayor dificultad en términos de tasas de interés, situación económica o laboral y precio de las viviendas, estiman que el momento actual para la compra de una vivienda será mejor que en los próximos meses”, agregó Barros.
Con respecto al perfil de esos futuros compradores, la encuesta detectó que ocho de cada diez están adquiriendo una vivienda por primera vez y que un 88% pretende darle uso residencial al inmueble.
De esos compradores, dice Sergio Barros, un 51% estaría “muy dispuesto” a pedir un crédito hipotecario, siendo esto mayor entre quienes compran por primera vez y son menores de 40 años.
¿En qué se fijan a la hora de comprar?
Otro de los aspectos de los que dio cuenta la encuesta, es que quienes actualmente están en búsqueda de una vivienda siguen fijándose en el precio y la ubicación como ejes centrales de la decisión; sin embargo si se comparan con 2021, estas características pierden fuerza. En el caso del precio baja de un 82% en 2021 a un 68% en 2022. Por su parte el aspecto ubicación cae levemente de un 60% a un 59% en el mismo periodo.
Por otro lado, los aspectos que se relacionan con seguridad, tamaño y cantidad de dormitorios crecen significativamente de un año a otro. En 2021 un 28% se fijaba en materia de seguridad al momento de buscar una vivienda para vivir, este 2022 esa cifra creció a un 35%.
Asimismo, la importancia por el tamaño de la propiedad aumentó desde un 27% a un 35% en el mismo periodo y la cantidad de dormitorios pegó un salto de un 19% a un 34% en un año.
Sobre esto último, Sergio Barros destaca que “las preferencias por viviendas de tres dormitorios son las que concentran el 50% el mayor porcentaje de las preferencias. Un poco más abajo se encuentran los inmuebles que ofrecen dos dormitorios, que se ubican en el 40% de las preferencias”.