Este Día Internacional de la Mujer, es crucial reflexionar sobre los pasos necesarios para promover la igualdad de género y empoderar a las mujeres en todas las esferas de la vida. Uno de los aspectos que suele quedar atrás —y es fundamental— es su autonomía económica, la que debe ser digna y cumplir con toda la formalidad necesaria para que accedan a la protección social.
Una historia de vida que nos habla de esto es la de Carmen Gloria, una emprendedora de la comuna de Curicó, que empezó con una idea de negocio que creció con el apoyo del Fosis, programa tras programa. Ella dio un gran salto al formalizarse, ya que pudo ampliar su red de clientes, aumentó la variedad de sus productos y se transformó en una de las principales reposteras de tortas sin azúcar y para personas celíacas de su comuna. Hoy, las perspectivas de Carmen Gloria son mucho más prometedoras que si no se hubiera formalizado.
Al formalizar sus negocios, hemos visto cómo miles de mujeres emprendedoras a lo largo de Chile, al igual que Carmen Gloria, toman control no solo de los recursos económicos, sino que también de sus proyectos de vida de una manera digna.
La formalización tiene beneficios para las mujeres en la reducción de brechas de inclusión financiera, aporta a la seguridad jurídica de sus negocios y les amplía decididamente los espacios de comercialización. Esto les permite ampliar sus redes de clientes y allegar más recursos a sus hogares, mejorando las perspectivas de bienestar y autonomía para ellas y sus familias.
Nuestro gobierno dará, durante 2024, un paso más en esta agenda, proponiendo al país una fórmula que ha tenido un éxito importante en otros países del mundo: la creación de un monotributo social para microemprendimientos. Un monotributo social es una política que simplifica el trámite de formalización y sustituye los múltiples trámites tributarios por un pago único mensual que cubre las obligaciones tributarias, al mismo tiempo que aporta para su seguridad social.
En la misma línea, mientras se da esta tramitación legislativa, adelantaremos trabajo, de la mano de la Defensoría del Contribuyente (DEDECON). En concreto, el Fosis y la Dedecon van a ofrecer acompañamiento especializado para la formalización tributaria de emprendedoras. En las próximas semanas estaremos anunciando la forma y metodología específica de trabajo que llegará a las emprendedoras de todos los rincones de nuestro país.
En esta nueva conmemoración de las mujeres y su lucha cotidiana por la igualdad, desde el Fosis, seguiremos transformando las condiciones estructurales que permitan a más mujeres prosperar significativamente en sus emprendimientos.
La autonomía económica de las mujeres en dignidad no es solo un derecho, es una realidad que podemos construir juntos y juntas.
El autor es Director Nacional del Fondo de Solidaridad e Inversión Social, (Fosis)