A pesar de que en octubre la confianza de los consumidores chilenos había tenido una alza al pasar de “moderadamente pesimista” a “levemente pesimista”, según último Índice de Percepción del Consumidor (IPeCo), elaborado por el Centro de Estudios en Economía y Negocios de la Universidad del Desarrollo (UDD), en noviembre se regresó a “moderadamente pesimista”. Esto, debido a una caída gradual de 3,9 puntos.
Sin embargo, el promedio móvil trimestral del IPeCo, que muestra de mejor forma la tendencia a mediano plazo aumentó gradualmente. “Las noticias económicas vigentes durante el mes (noviembre) fueron mayormente negativas para la confianza de los consumidores. El Imacec de septiembre cayó un 0,4% en los últimos doce meses. Por otro lado, el Índice de Actividad del Comercio (IAC) aumentó un 2,6% en octubre, con lo que sumó una caída anual de 11,4%. Respecto de la inflación, el IPC aumentó en 0,5% en septiembre, acumulando un crecimiento de 12,8% en un año”, detalla el informe como algunas de las causas de la percepción de los consumidores.
Donde los chilenos no tienen una visión muy optimista es con lo que viene. Según el IPeCo, la confianza en el futuro (índice de expectativas) de los consumidores retrocedió gradualmente (5,5 puntos), de moderadamente pesimista a pesimista. “Esto se debió a una marcada caída de la percepción de la situación económica futura, junto con un retroceso gradual de la percepción del desempleo futuro. En contraste, la percepción de los ingresos futuros mejoró gradualmente”, detalla el informe.
De esta forma, la percepción de la situación económica futura disminuyó 11,8 puntos, de pesimista a muy pesimista. Por otro lado, la percepción del desempleo futuro retrocedió de levemente optimista a levemente pesimista, tras una caída de 14,2 puntos, “explicado por un aumento de las visiones pesimistas y neutrales, y una disminución de las visiones optimistas”, dice el documento dado a conocer por la UDD. Finalmente, la percepción de los ingresos futuros avanzó 6,4 puntos, de muy pesimista a pesimista.
Hilando más fino, con respecto a la “confianza en la actualidad”, que es otro elemento que mide este índice, prácticamente no varió durante el mes (0,4 puntos), manteniéndose levemente optimista. “Esto se debió a una caída marginal en la percepción de la situación económica actual, que fue compensada por un incremento similar de la percepción del desempleo actual”, detalla el informe.
La percepción de la situación económica actual disminuyó 0,9 puntos durante noviembre, aunque permaneció moderadamente pesimista, lo que se explica por un aumento de las visiones pesimistas y un retroceso de las visiones neutrales y optimistas. Por otra parte, la percepción del desempleo actual aumentó 3,1 puntos, aunque se mantuvo moderadamente optimista, debido a una disminución de las visiones pesimistas y un incremento de las visiones neutrales y optimistas.
Además, durante noviembre de 2022, la sensación respecto al desempleo declarado por los consumidores aumentó, en contraste con la nula variación de la tasa de desempleo del INE durante el trimestre terminado en octubre.