El Banco Central de alineó con el mercado y recortó en 25 puntos base la Tasa de Política Monetaria (TPM) y la situó en 5,75%. No obstante, la decisión no fue unánime, ya que la vicepresidenta Stephany Griffith-Jones votó por reducirla en 50 puntos base. En tanto, la presidenta del ente rector Rosanna Costa, los Consejeros Luis Felipe Céspedes, Alberto Naudon y Claudio Soto optaron por recortar en 25 puntos base.
En su mensaje principal, el Banco Central señaló que “el consejo estima que, de concretarse los supuestos del escenario central, la TPM habría acumulado durante el primer semestre el grueso de los recortes previstos para este año”.
En ese sentido, menciona que “el escenario central del Ipom de junio considera que la TPM seguirá reduciéndose durante el horizonte de política monetaria, a un ritmo que tomará en cuenta la evolución del escenario macroeconómico y sus implicancias para la trayectoria de la inflación. El Consejo reafirma su compromiso de conducir la política monetaria con flexibilidad, de manera que la inflación proyectada se ubique en 3% en el horizonte de dos años”.
En su descripción del escenario macroeconómico, el ente rector sostiene la actividad local ha ido retomando una senda de crecimiento coherente con su tendencia. “En abril, la serie desestacionalizada del Imacec no minero tuvo una variación nula respecto del mes anterior (+3,5% en doce meses), reforzando que algunos de los factores que aceleraron la actividad a inicios de año tenían un carácter transitorio”.
Menciona que “el mercado laboral mantiene coherencia con la trayectoria del ciclo, con una creación de empleo positiva y una tasa de desempleo que se ubicó en 8,5% en el trimestre móvil terminado en abril. Las expectativas de empresas y hogares se mantienen en niveles pesimistas, aunque han ido mejorando en los últimos meses”.
Sobre la inflación, subrayan que “en mayo, la variación anual del IPC —serie referencial empalmada— se ubicó en 3,4% y que la medida subyacente —IPC sin volátiles— en 3,5%. (4,1% la serie referencial INE)″.
En cuanto a las expectativas de inflación a dos años plazo, puntualiza que “tanto la Encuesta de Expectativas Económicas (EEE) como la Encuesta de Operadores Financieros (EOF) se encuentran en 3%”.
Respecto de marzo, las novedades del escenario central de proyección son el mejor punto de partida de la demanda interna, que será apoyado por el mayor precio del cobre, y el reajuste de las tarifas eléctricas, que impactará de forma significativa la inflación, particularmente en 2025. El IPoM que se publicará mañana contiene los detalles del escenario central, las sensibilidades y riesgos en torno a este y sus implicancias para la evolución futura de la TPM.
En cuanto al mercado financiero, el ente rector destacó que los movimientos del mercado financiero chileno han sido similares a los de sus pares externos. “Desde la Reunión de mayo, el IPSA tuvo una caída acotada y el peso acumuló una depreciación cercana a 3% respecto del dólar. Las tasas de interés de largo plazo, aunque con algún vaivén, se encuentran en niveles similares a los de la última Reunión”.
Si bien puntualiza que “el comportamiento del crédito comercial ha sido coherente con los fundamentos macroeconómicos, muestra cierta desaceleración que debe ser monitoreada. Esto, en un contexto donde las condiciones de oferta y demanda se perciben como poco favorables”. En ese contexto dice que “las tasas de interés de las colocaciones bancarias de corto plazo han disminuido acorde con la transmisión de la reducción de la TPM, mientras que las tasas a plazos más largos, entre ellas las hipotecarias, se han mantenido en niveles elevados en comparación histórica, más vinculadas al comportamiento de sus pares externos”.
En el escenario externo, destaca que la inflación mundial ha seguido disminuyendo, aunque a un ritmo más moderado. En Estados Unidos, el registro de mayo estuvo bajo lo previsto, con un componente de servicios que se desaceleró, pero sigue siendo un punto de atención relevante. Todo esto, en un contexto en que el mercado laboral en esa economía ha mostrado señales mixtas en lo reciente. Respecto de la actividad, el BC dice que las cifras del primer trimestre superaron lo previsto en varias economías, no obstante, las perspectivas se mantienen acotadas y sin grandes cambios para este y el próximo año.
Los movimientos de los mercados financieros globales han seguido sujetos, en gran medida, a las expectativas sobre cuándo la Reserva Federal iniciará sus recortes de tasas. En comparación con la Reunión de mayo, las tasas de interés de largo plazo han descendido en varias economías desarrolladas, incluido Estados Unidos, y han aumentado en las emergentes.