La actividad económica enfrenta un ciclo menos positivo de lo previsto en diciembre. El escenario externo se complicó y la aceleración proyectada en el Informe de Política Monetaria (Ipom) en diciembre no se está concretando. Esto tuvo implicancias directas en la trayectoria fijada para la Tasa de Política Monetaria (TPM). Si en diciembre se esperaba cuatro alzas durante 2019, ahora, en marzo, se prevé solo un incremento hacia fines de año.
"En el corto plazo, se utiliza como supuesto de trabajo la trayectoria de la TPM que muestra la Encuesta de Expectativas Económicas de marzo, la que no contempla cambios en la tasa al menos durante los próximos dos trimestres". No obstante, dicha medición tiene incorporado un incremento hacia la última parte del año, por lo que el Central implícitamente tiene internalizada un alza en 2019. En ese sentido, el presidente del BC, Mario Marcel, subrayó que "de haber un alza adicional de la TPM eso ocurriría hacia final del año (…). Es reflejo de tener una medición de inflación que también es considerablemente más baja".
Para el mediano plazo, el ente rector añadió que las proyecciones son coherentes con que la TPM alcance su nivel neutral hacia fines del horizonte de política, es decir, principios de 2021. "El Consejo ha venido estimando que la TPM neutral se ubica entre 4% y 4,5%, parámetro que también se revisará en el Ipom de junio", precisó el reporte.
El factor inflación
"El proceso será llevado a cabo con gradualidad y cautela, teniendo presente que el menor nivel de la inflación y sus perspectivas otorgan mayor espacio para evaluar la velocidad apropiada", indica el Ipom, agregando que su menor nivel actual y la estimación de mayores holguras de capacidad (ver página 11) su convergencia a 3% se retrasa respecto de lo previsto en diciembre pasado. De hecho, se ajustó la previsión de 2,9% a 2,6% y anotará el cuarto año consecutivo con precios por debajo de la meta del BC de 3%.
Actividad
En materia de actividad económica, el BC recortó su proyección de crecimiento para este año desde un rango de 3,25% a 4,25% a uno entre 3% y 4% por el menor comportamiento de la minería. Si bien se recortó el PIB, el BC subió su previsión para la inversión de 6% a 6,2% sustentado principalmente por el componente maquinaria y equipos que sostiene el mayor avance, con importaciones de bienes de capital que permanecen en niveles altos. Para 2020, la estimación de PIB se subió desde 2,75% a 3,75% a un nivel entre 3% y 4% también sostenido por la inversión, que pasó de 3,9% a 4,3%. Sin embargo, para 2021 la estimación es menor, ya que se fijó un rango entre 2,75% a 3,75%. Ante este escenario, el ministro de Hacienda, Felipe Larraín, dijo que "las proyecciones futuras dependen de lo que podamos hacer para avanzar en una serie de reformas que son importantes para Chile", no obstante, destacó que Chile pueda crecer en torno a 3,5% considerando el complejo escenario externo donde se recortó las previsiones para 2019 y 2020 a 3,3% y 3,2% respectivamente.