En su última reunión de política monetaria, el Consejo del Banco Central acordó por la unanimidad de sus miembros mantener la tasa de interés en 2,75%.
Sin embargo, según las minutas de esa sesión, la autoridad monetaria consideró como una opción elevar el precio del dinero en 25 puntos base, a 3%.
De acuerdo al documento que publicó el emisor, esta posibilidad podría apoyarse en la idea que, "dada la amplia brecha entre la tasa actual y su nivel neutral", el riesgo de equivocarse era bajo y permitiría graduar más las alzas futuras.
"Sin embargo, tenía como principal punto en contra que podría dar una señal de urgencia en el retiro del estímulo monetario que no era coherente con la gradualidad y cautela comprometida por el Consejo", afirmó la entidad dirigida por Mario Marcel.
Por el contrario, estimó que "la principal razón" para mantener la tasa en 2,75% era la coherencia entre las acciones del Banco y su comunicación, en especial en cuanto a que el retiro del estímulo monetario se haría de forma gradual y con cautela.
Al mismo tiempo, coincidió en que el sesgo al alza que acompañaba esta decisión reafirmaba que dicho proceso continuaría en los próximos meses.