Un ajuste abrupto de las condiciones de financiamiento externas sigue siendo una de las principales amenazas para la estabilidad financiera, según muestra el Informe de Estabilidad Financiera (IEF) del segundo semestre que publicó ayer el Banco Central (BC).
Sin embargo, esta amenaza ya había sido advertida por el ente emisor en el IEF anterior, todo ello en medio de un gradual proceso de normalización de política monetaria en economías avanzadas, donde persiste el riesgo de que el ajuste de EEUU sea más rápido de lo esperado.
Pero el informe agrega una nueva potencial vulnerabilidad: las firmas que tienen exposición a Brasil y Argentina, tema que no había sido mencionado antes.
En esa línea, el IEF detalla que "se configura una potencial vulnerabilidad en el grupo de empresas con inversiones en economías emergentes -como Argentina y Brasil- que podrían verse afectadas por cambios en la situación económica de dichos países", pero el informe también dice que el endeudamiento con la banca local que tienen estas firmas "es acotado".
El BC usa cifras para mostrar el panorama: para algunas empresas locales que reportan a la Comisión para el Mercado Financiero (CMF), las inversiones que tienen en Argentina y Brasil alcanzan el 16% del total de sus activos, o hasta un 27% del total de sus ventas, "y por tanto podrían estar afectadas por el ciclo económico de ellas.
De este modo, un ajuste del modelo de negocio de estas firmas podría afectar a algunas firmas locales que actúan como proveedores y que usualmente mantienen compromisos financieros con la banca".
Sobre este tema, ayer el presidente del Central, Mario Marcel, aclaró que estas participaciones que tienen las compañías chilenas en ventas y activos "son relativamente moderadas".
Además, dijo al respecto que "las magnitudes y particularmente el vínculo con el sistema financiero chileno es relativamente modesto, por esto el potencial impacto sobre la estabilidad financiera es limitado, sin embargo, dado que este es un canal que antes no existía (...), es un vínculo que tenemos que poder seguir monitoreando, especialmente si se va ampliando esta internacionalización de las compañías chilenas".
Con todo, según destacó ayer Marcel, no ha habido eventos de disrupción importantes en el sistema financiero local desde el último IEF, pero son tres los focos de tensión a futuro para la estabilidad financiera:
1 "La menor disponibilidad de holguras que deja el período de bajo crecimiento precedente, y la evolución de algunos sectores", destacó.
En ese sentido, explicó que esto se observa en una mayor intensidad del endeudamiento de los hogares, menores holguras de capital de la banca para enfrentar escenarios de tensión, y una situación financiera menos favorable para algunas empresas, particularmente por firmas de sectores relacionados con el mercado inmobiliario residencial que "han mostrado algún deterioro", dice el IEF.
Eso sí, el informe muestra que en general, no se observan vulnerabilidades financieras relevantes para las empresas locales, donde la deuda alcanzaría cerca de un 113% del PIB al tercer trimestre.
2 "Riesgos de un empeoramiento del escenario externo, en particular, preocupan situaciones que puedan cambiar repentinamente las percepciones de riesgos, afectando así a economías más vulnerables", destacó Marcel.
En ese sentido, el presidente del Central detalló que a esto se agregan "nuevos canales de transmisiones hacia la economía local, por ejemplo, el que podrían generar empresas chilenas que tienen inversiones en el exterior".
Allí entran las empresas que tienen exposición a Brasil y Argentina, pero también el efecto que pueda generar en el mercado un empeoramiento de las condiciones externas.
De hecho, el IEF detalla que "el mayor patrimonio alcanzado por los fondos mutuos de renta fija... ha aumentado el potencial efecto de una liquidación masiva de sus portafolios ante un alza abrupta de tasas largas".
3 "Desarrollos recientes que pueden originar nuevas fuentes de vulnerabilidad en el mercado financiero local, sin que se hayan adecuado las regulaciones respectivas", comentó Marcel.
Entre estos temas, destaca el crecimiento relativo del crédito otorgado por oferentes no bancarios, el desarrollo de la inversión inmobiliaria por parte de minoristas, y la exposición de instituciones financieras a ciberataques.