El segundo retiro del 10% de los fondos de pensiones se encamina a ser una realidad. Y por ello, el debate está centrado en si este retiro se puede hacer en un solo pago o en dos cuotas, como lo que ocurrió en el primer retiro.
Si bien las AFP están dispuestas a hacer lo mismo, el Banco Central (BC), en coordinación con el Ministerio de Hacienda y del Trabajo, ha transmitido que esto podría afectar la disponibilidad de billetes que hay en el país.
Esto en un contexto en que la cantidad de dinero en efectivo está en niveles récord en todas sus categorías. De hecho, según cifras del instituto emisor, los billetes de $20 mil subieron casi 50% en un año, mientras que los de $10.000 crecieron 32,3% y los de $5.000 un alza de 88%.
El argumento de las autoridades para solicitar los dos pagos es que a fin de año siempre se produce una mayor demanda por efectivo, principalmente explicado por Navidad, por lo que la idea de hacerlo en dos cuotas es no estresar la disponibilidad de billetes a fin de año.
Ante este problema, el BC afirmó a Pulso que “un retiro de los fondos de pensiones implica una serie de desafíos para la cadena logística que se debe activar para implementar todo el proceso, desde la solicitud que formula el afiliado hasta que éste utiliza los fondos retirados”. En ese contexto añade que “se trata de un proceso en el que intervienen distintas instituciones, que no se articula de manera instantánea y que debe garantizar seguridad, especialmente para el afiliado. Por esa razón, la normativa debe generarse con prudencia y realismo respecto a los plazos, de tal manera de no defraudar a los beneficiarios. Este criterio se relaciona con todos los eslabones de la cadena logística, no con uno en particular”.
El instituto emisor precisa que “es importante destacar que tanto los mercados financieros como la logística de los bancos necesitan adaptar sus procesos para llevar a cabo una liquidación masiva de activos, como la que se produjo en el primer retiro, y que podría repetirse en esta ocasión. Esta operación excede largamente cualquier proceso que normalmente enfrente la economía”.
En lo que se refiere a la provisión de efectivo, el Banco Central sostuvo que “mantiene un trabajo conjunto permanente con los bancos comerciales, orientado a proveer billetes y monedas en todo el país, de manera de asegurar el abastecimiento acorde con la demanda del público que, desde octubre de 2019, ha crecido muy por encima de sus niveles históricos”. No obstante, precisó que “cada actor individualmente no puede responder por el total de esta cadena. Por eso es necesario actuar con realismo respecto a la velocidad de todo el proceso, realismo que, en último término, significa respeto por el beneficiario final, evitando exponerlo innecesariamente a riesgos para su salud, su seguridad y su confianza”.