Los bancos que operan en el sistema financiero chileno acumularon ganancias en los primeros siete meses del año por $3.443.531 millones, o unos US$3.778 millones, cifra que significa un aumento del 48,32% en 12 meses. Esto de acuerdo con un reporte entregado este martes por la Comisión para el Mercado Financiero (CMF).

Las utilidades de la banca a julio, en tanto, alcanzaron los $ 434.620 millones o US$477 millones. Esto es una caída considerando las ganancias por $538.285 millones o US$585 millones registradas en mayo pasado.

En cuanto a las ganancias atribuibles a los propietarios estas se empinaron a $3.380.463millones entre enero y julio. En este ámbito, Banco de Chile lidera en el sistema bancario local con utilidades que ascienden a los $845.521 millones, seguido por Banco Santander con $587.279 millones y Bci con $508.841 millones.

Por otra parte, las colocaciones del sistema bancario crecieron 2,61% en 12 meses, lo que es menor al alza de 4,35% registrada en mayo y a la caída de 1,83% ocurrida en el mismo mes del año pasado.

El comportamiento de las colocaciones en julio se explicó “por un menor dinamismo en las tres carteras respecto del mes anterior”, de acuerdo a la CMF.

Las colocaciones comerciales desaceleraron su crecimiento desde un 3,55 % a un 0,87 % en 12 meses, las de consumo lo hicieron desde un 6,17 % a un 4,30 % y las de vivienda desde un 4,31 % a un 3,62 %.

En materia de riesgo de crédito, los índices de provisiones sobre colocaciones y de cartera deteriorada se mantuvieron respecto del mes anterior, mientras que el indicador de morosidad de 90 días o más aumentó en el mes.

Respecto de 12 meses atrás, los coeficientes se ubicaron por debajo de los alcanzados en el mismo período de 2021, con excepción del indicador de provisiones y de morosidad de 90 días o más de la cartera de consumo.

De esta manera, en julio el índice de provisiones sobre colocaciones se mantuvo estable en un 2,36%, registrándose un menor indicador en las carteras comercial y vivienda y un alza en el coeficiente de consumo respecto del mes anterior.

El índice de cartera deteriorada se mantuvo en un 4,44%, con alzas en los respectivos indicadores de las carteras comercial y de consumo, contrarrestados por una disminución en el coeficiente de vivienda.

A su vez, el índice de cartera con morosidad de 90 días o más aumentó de 1,41 % a 1,43 % en el mes, producto de igual movimiento en las carteras comercial y de consumo, por el contrario, el indicador de vivienda retrocedió.