Bayer AG se halla a escasos días de transformarse en el mayor fabricante de semillas y productos químicos agrícolas, en tanto dice que proyecta cerrar su compra de Monsanto Co. esta semana.

Bayer mantendrá su nombre y abandonará el de Monsanto cuando firme el acuerdo este jueves al tiempo que captará US$30.000 millones en acciones y bonos.

La compra forma parte de una transformación plurianual, en tanto Bayer liquidó su negocio obsoleto de plásticos y se reformuló como una compañía dedicada a las ciencias de la vida con aproximadamente la mitad de sus ventas provenientes de la salud y la mitad de la agricultura. Se trata de la tercera de una serie de mega-transacciones en el sector, después de la fusión de Dow Chemical Co. con DuPont Co. y la compra de Syngenta AG por parte de China National Chemical Co.

"Estamos a punto de cerrar la transacción para crear pronto un nuevo líder en la agricultura", dijo el máximo responsable Werner Baumann este lunes. No descartó otros cambios de cartera, en tanto dijo en una conferencia de prensa que la compañía con sede en Leverkusen, Alemania, continuará "manejando de manera activa" sus unidades. "Quedarse quieto significa retroceder".

El acuerdo duplicará el tamaño del negocio agrícola de Bayer. Las acciones experimentaron escasas modificaciones en 102,50 euros a las 11:35 horas en Fráncfort. La acción tuvo una rentabilidad de 2,2 por ciento este año, en comparación con una declinación de 1,3 por ciento del índice de referencia DAX.

Bayer proyecta captar 6.000 millones de euros en una oferta de acciones con derecho a suscripción y 20.000 millones de euros en ventas de bonos, dijo el domingo. El valor total del acuerdo por US$63.000 millones refleja la deuda pendiente de Monsanto al 28 de febrero.

S&P rebajó dos niveles la calificación anterior A- de Bayer. La compañía tratará de retornara a una nota A- a largo plazo pagando deuda, dijo Baumann.

En el marco de la oferta de acciones, los accionistas existentes podrán comprar dos acciones nuevas por cada 23 que tienen a un precio de 81 euros, dijo Bayer. Eso representa un descuento de 22 por ciento en relación con el precio de cierre de la compañía alemana el 1 de junio.

Colocó la oferta un grupo de 20 bancos. Los coordinadores globales conjuntos son Bank of America Merrill Lynch y Credit Suisse. Bayer captó un préstamo de US$56.900 millones en octubre de 2016 para financiar la adquisición, dijo en aquel momento la compañía.

A los efectos de obtener la aprobación del departamento de Justicia estadounidense para la transacción, Bayer aceptó vender activos a BASF SE. El plan de desinversión tiene un valor de unos US$9.000 millones, el mayor en un caso de ejecución de fusión estadounidense, dijo el gobierno. La compañía alemana presentó, dijo, alrededor de 40 millones de páginas de documentos a las autoridades estadounidenses y europeas, casi lo suficiente como para llegar desde Leverkusen hasta la sede de Monsanto en St. Louis y volver.

Se prevé que la integración comenzará una vez realizada la venta de BASF, probablemente en el plazo de dos meses.