De un garaje reacondicionado a una amplia oficina, ambientada como un panel de abejas y decorada como el tránsito de la ciudad, fue la metamorfosis que tuvo Beetrack. El software de seguimiento en línea de envío de productos, que nació en 2013, ya cuenta con más de 400 clientes en 14 países, donde los principales son Chile, México, Perú, Colombia, Bolivia, Ecuador y Argentina. Además, tiene presencia comercial en tierras locales, incaicas, aztecas y cafeteras.
La startup, que hoy factura cerca de US$3 millones, y que tiene un retorno de cerca del 30%, logró tener a Ripley como su primer cliente en base a lo que Beetrack prometió en su presentación, ya que lo único que existía del proyecto antes de esto era lo que estaba en las diapositivas. "Yo salí a vender el producto en una maqueta hecha en PowerPoint, siendo muy consciente de las capacidades técnicas que teníamos para desarrollarlo", recuerda el actual CEO y socio fundador de la compañía, Sebastián Ojeda.
Luego de cerrar el trato con la empresa ligada a la familia Calderón, Beetrack en cerca de tres meses ya estaba en marcha y prestando sus servicios a cinco camiones de despacho de Ripley a modo de prueba. "Un cliente llamó sumamente molesto porque el delivery no había cumplido con el día comprometido. Ese pedido había salido con Beetrack y el servicio le mostró que fueron al domicilio, lo describió, el tipo se dio cuenta que no estaba y tuvo que reconocerlo", dice Ojeda quien cree que fue lo que hizo ver al retailer que había un potencial y que para septiembre del mismo año lo había contratado para administrar toda su flota.
Sin embargo, la cadena de tiendas tampoco hizo una apuesta a ojos cerrados. La cadena de retail a nivel nacional le pidió a uno de sus proveedores que utilizara el servicio y, en paralelo, realizó un hackeo ético para ver qué tan robusto era el servicio.
El CEO de Beetrack, quien fue gerente de operaciones de Falabella.com hasta 2009 cree que esa experiencia fue lo que le permitió lograr rápidamente el primer cliente, que a juicio de Ojeda es lo más importante para quienes buscan emprender. Por su parte, el actual jefe de operaciones y socio fundador, Nicolás Kipreos, venía desde el mundo de desarrollo de softwares. El financiamiento tampoco fue un dolor de cabeza. "La empresa se financió con US$200 mil con préstamos de los mismos socios y ese ha sido la única inversión. El resto solo ha sido flujo de caja, que muy tempranamente fue positivo", comenta Ojeda.
También se ganaron un fondo de Corfo, que si bien no era una necesidad, si les dio un impulso en una etapa inicial del emprendimiento.
Su salto internacional también fue rápido. En 2014 a Beetrack se le abrió el apetito por llegar a mercado extranjero y consiguió lograr un acuerdo con una empresa de transporte en Perú. Hoy la compañía manda desde Chile a sus oficinas comerciales, de otros países, personal para que capacite y levante un equipo comercial que haga crecer a la empresa fuera de Chile. En esa línea, los grandes gastos de la compañía se van en recursos humanos, que incluso cuenta con un headhunter interno.
Sobre los buenos resultados que ha tenido la empresa, el CEO de la compañía, más allá de la calidad del software, destaca su servicio de atención y retención de sus clientes y agrega que "nosotros hemos traído todo lo bonito de las aplicaciones, toda la usabilidad que ve en aplicaciones como Spotify, la trajimos al mundo empresa".
Mientras que sobre las ventajas directas con la competencia, Ojeda se jacta de que "si bien nosotros no sabemos con exactitud los atributos de los competidores, en las licitaciones que nos convocan prácticamente ganamos en todas".
Nuevos desafíos
La compañía desde la semana pasada dejó su oficina en Alonso de Cordova porque ya no había más espacio para el personal, quienes tenían que ir al comedor por turnos para almorzar. Ahora trabajan a unas cuadras de ahí, en Apoquindo y en una oficina de más del doble de espacio que la anterior.
Actualmente la compañía cuenta con 44 personas trabajando y en medio de su plan de contratación pretenden llegar a 60 para este año.
Respecto al futuro del servicio, Beetrack próximamente va a lanzar un mejoramiento en su servicio de planificador de ruta óptima.
Sobre cuáles son las metas a largo plazo de la empresa, el CEO dice que quieren ser "la mejor empresa, al menos en Latinoamérica, de experiencia post compra del cliente. Nuestro foco está en que los clientes sean más felices y todo lo hacemos a través de las empresas, no vamos directamente al cliente final, para que sean ellos los que hagan felices a sus clientes".