En un año negativo para los mercados latinoamericanos en general, un instrumento de inversión podría sacar la cara por la región.

De acuerdo con Pablo Costella, subgerente de renta fija extranjera de BICE Inversiones, la deuda latinoamericana en dólares está exhibiendo atractivos niveles de retorno en un año.

En particular, el rendimiento de la categoría blend, que consiste en una mezcla de investment grade (IG) más high yield, está en niveles de 6,1%, mientras que la de los bonos con grado de inversión se encuentra en 5,5%.

En ese escenario, detalla Pablo Costella, "se observa que la categoría IG está por sobre una desviación estándar del promedio de los últimos 8 años, mientras que la categoría blend está en torno a su media histórica".

¿Entonces, es un buen momento para invertir en este instrumento?

Según el ejecutivo de BICE Inversiones, "es una ventana de entrada atractiva. Primero, por el nivel de retorno que hoy día está dando el asset class. Pero adicionalmente, porque este descuento con el que se encuentra el tipo de activo no ha venido de la mano de un deterioro de los fundamentales de las compañías que tenemos bajo cobertura".

Esto implica que se está generando una disociación respecto del valor de mercado de los activos y una tendencia de fortalecimiento de balance de éstos. Por ejemplo, precisa Costella, en Brasil y México hay empresas con una mejor posición de liquidez, por lo que no tienen presiones importantes en los perfiles de vencimiento.

"Sin embargo, no hay que olvidar que lo relevante acá es ser selectivo en los créditos que se toman las posiciones, y esto sólo se puede lograr después de un profundo análisis de detección de variables que inciden en el deterioro/mejoramiento de las compañías desde la perspectiva del riesgo crediticio", advierte el experto.

Los factores

Esta situación se ha generado tanto por factores políticos como de mercado, explica Costella.

En el plano político, la eventual participación de Lula en las elecciones de Brasil impulsó de forma considerable el premio por riesgo país, el real se depreció y en el mercado abundó un sentimiento de "sell off".

A ello se suman las diversas dificultades que vivió Argentina durante el año: la intervención del Fondo Monetario Internacional (FMI), y los cambios realizados en el Banco Central y en algunos ministerio, entre otras.

Otro factor político al que apunta BICE es el presidente de México, Andrés Manuel López (AMLO), quien tras ganarse la confianza del mercado, la quebró al revertir el proyecto del aeropuerto de Ciudad de México, entre otros hitos.

Respecto a las razones de mercado, son dos, principalmente, según el experto. Uno de ellos es el proceso de alza de tasas de la Reserva Federal y el otro es el "sell off" de mercados emergentes, lo que fue impulsado por el fortalecimiento del dólar.

Versus otras zonas

Dentro de las oportunidades que presenta la deuda Latam actualmente, la categoría de grado de inversión es la que acapara mayor atención.

"Por el lado de la categoría investment grade, es un activo muy atractivo respecto de sus pares", afirma Costella. Y añade que "esto explicado por la calidad de crédito del índice (BBB), teniendo una diferencia de cuatro escalones con el comparativo de Estados Unidos (US) Investment Grade (A+), pero con una diferencia de más de 100 puntos base en términos de devengo, conteniendo spread en niveles altísimos respecto de su historia".

Además, el índice es más profundo que sus comparables de África, Europa y Medio Oriente, junto con tener una mayor diversificación de emisores y emisiones.

"Adicionalmente, cuando analizamos el diferencial de spread entre US IG y Latam IG, observamos que el castigo a Latinoamérica está en máximos históricos, por sobre una desviación estándar, lo que habla de la oportunidad que estamos observando", enfatiza el experto.