Las acciones mundiales intentan tomar un respiro y descansar de las últimas frenéticas jornadas en la que hubo una verdadera estampida de inversionistas de la renta variable a raíz de la escalada en la guerra comercial.
Ayer las acciones tuvieron su peor jornada desde febrero de 2018 luego de que China dejara caer al yuan a mínimos desde 2008, en represalia a los aranceles anunciados por Donald Trump. Y EEUU no se quedó ahí pues amenazó con responder a Beijing a través del FMI.
La sesión de hoy llega ligera de cifras macroeconómicas, con únicamente las órdenes de pedidos de Alemania del mes de junio y la cifra de empleos disponibles en EE UU, también del mes de junio. Los expertos no creen que estos datos tengan reflejo en los mercados, consignó CincoDías.
En ese contexto, las acciones del Euro Stox 50 cayeron un 0,58%, moderando las bajas de más de 2% en la jornada anterior. El índice MSCI Asia Pacific cayó un 0,8%, mientras que el Nikkei de Japón cerró con una baja del 0,65%.
Wall Street
Un mejor ánimo entre los inversionistas llega este martes a Wall Street, donde los principales indicadores de la plaza bursátil operan con cifras positivas.
El Dow Jones avanza un 0,43%, el S&P 500 un 0,32% y el Nasdaq un 0,65%, y dejan atrás seis sesiones consecutivas de retrocesos.
El sector consumo y el tecnológico son los que lideran los avances a media sesión.
El mayor optimismo viene de la mano con los comentarios del asesor económico de la Casa Blanca, quien indicó que Donald Trump quiere seguir adelante con las negociaciones comerciales con China, lo que puso paños fríos a la enorme incertidumbre que se levantó en los últimos por el anuncio arancelario.
En septiembre continuarían las conversaciones entre las dos principales economías del mundo.
Bolsa de Santiago
La Bolsa de Santiago también se contagia del ánimo un poco más optimista que ha llegado a los mercados internacionales.
Así el Ipsa sube un moderado o,09%, tras haber caído más de un 2% en la jornada previa.
China adopta medidas
El yuan por su parte frenó el martes sus caídas luego de que las autoridades tomaron medidas para contener a la moneda.
El yuan ha perdido hasta 2,7% en los últimos tres días, al situarse bajo la marca de 7 unidades por dólar, lo que golpeó a las acciones y empujó a los bonos porque los inversionistas temen que el valor de la divisa china se haya convertido en un nuevo frente de la guerra arancelaria.
Según Reuters, el Banco Popular de China tomó medidas para estabilizar la moneda con un rango de cotización más firme y anunciando una venta de deuda, en una señal de que las autoridades desean desinflamar el frente cambiario, lo que llevó al yuan offshore a ganar casi 0,5% contra el dólar.