En medio de tensiones con el empresariado, con declaraciones de lado y lado, la mañana de este jueves el Presidente Gabriel Boric encabezó la inauguración del Encuentro Nacional de la Empresa (Enade) 2024, que en esta versión llevó por título “Contra el inmovilismo”.
En el inicio del foro económico organizado por Icare, que se desarrolló en el centro de convenciones Metropolitan (ex CasaPiedra) en Vitacura, el Mandatario estuvo acompañado de buena parte de su gabinete, entre ellos los ministros Carolina Tohá de Interior, Alberto van Klaveren de Relaciones Exteriores, Mario Marcel de Hacienda, Álvaro Elizalde de la Secretaría General de la Presidencia, Camila Vallejo de la Secretaría General de Gobierno, Nicolás Grau de Economía, Javiera Toro de Desarrollo Social, Luis Cordero de Justicia, Jeannette Jara del Trabajo, Aurora Williams de Minería y Antonia Orellana de la Mujer.
Tras las intervenciones de la presidenta del directorio de Icare, Karen Thal, y del presidente de la Confederación de la Producción y del Comercio (CPC), Ricardo Mewes, a eso de las 10:10 horas, Boric dio inicio a su discurso ante los presentes a la cita, uno de los principales eventos del mundo empresarial en el país, que este año contó además con la participación de la ministra de Seguridad de Argentina, Patricia Bullrich, y del exmandatario de Colombia, Iván Duque, desde el exterior.
Para la hora del discurso del Presidente había aproximadamente 1.200 personas, siendo la cifra más alta de los últimos años.
“La previa ha estado caliente”
El Mandatario inició su alocución con una pregunta a los presentes: “¿Les gusta ir al estadio?”. Y luego continuó: “A mí me gusta ir al estadio. Y trato de ir cuando el escaso tiempo que las responsabilidades del cargo me lo permiten. Y aunque no siempre gana mi equipo (Universidad Católica), como el fin de semana pasado, soy de aquellos que les gusta estar en las buenas y en las malas. Y si este fuera un partido de fútbol, podríamos decir que la previa ha estado caliente, declaraciones cruzadas, interpelaciones varias, y más de una provocación auguran un partido intenso, fuerte”.
“Y quizás hay algunos que esperan que así sea, pierna fuerte, mucho orgullo propio en cada equipo, ojalá tarjetas de diferentes colores, que cada uno juegue para su hinchada, alejándose lo más posible de la del adversario”, añadió. Pero tras esto, el Jefe de Estado hizo un llamado al empresario: “Los quiero invitar a cambiar el escenario, y en vez de cumplir con esos augurios y jugar un partido entre rivales, nos pongamos el objetivo de que terminemos este encuentro como si fuera un partido de la selección nacional”, dando cuenta de un tono conciliatorio.
Al respecto apuntó que “esto, por cierto, no significa esconder nuestras diferencias que son propias de una sociedad democrática. Tampoco, pretender hipócritamente que de la noche a la mañana vamos a ser todos entrañables amigos. Significa que a pesar de las diferencias que tenemos, seamos conscientes que tenemos también objetivos compartidos que son más grandes, y mucho más importantes que nuestros pasados desencuentros”.
A continuación, Boric hizo eco de algunas declaraciones del empresariado a través de la prensa.
“He seguido con atención las opiniones que se emiten desde el mundo empresarial, lo que no es difícil porque parte de la prensa les otorga una envidiable cobertura”, sostuvo, y luego agregó que “en los últimos días leí con cuidado las cartas que algunos presidentes de grandes compañías remitieron a sus accionistas. En ellas se dice, entre otras cosas, que la actividad del país está destruida, que hemos desperdiciado una década, que no hay voluntad de crecimiento, que se ha perdido el sueño de alcanzar el desarrollo, y ante este panorama incluso algunos señalan o proceden a llevar inversiones hacia el extranjero, en vez de hacer inversiones para el país”, manifestó.
Y agregó, “también se acusa muchas veces al gobierno de pecar de inconsistencia, o de no tener convicción ni planes para superar las dificultades que aquí se han relatado. Pero, a pesar de lo que dejan entrever algunos de estos juicios, y que creo y sé que no son compartidos por todos, y a pesar de lo que algunos podrían pensar de verdad, tengo muchísima curiosidad y muchas veces admiración por el profundo espíritu innovador que existe al interior de las empresas en Chile”.
Líneas rojas y portazos
Más adelante, y parafraseando el título de Enade 2024, el Presidente dijo tener la convicción que desde que asumió la máxima magistratura del país su administración ha “luchado contra el inmovilismo y promovidos cambios profundos que el país necesita”.
“No vinimos para quedarnos en nuestra zona de confort. Y eso implica cuestionar también, o modificar, los puntos de partida propios. Hemos buscado incansablemente acuerdos, promoviendo el diálogo y flexibilizando nuestras posiciones”, afirmó.
Y luego acusó: “Pero hay que reconocer que, por diferentes motivos, y sin apuntar con el dedo a nadie, ha costado hacerlo en un medio político crispado, en donde abundan las líneas rojas y los portazos. En donde es difícil obtener compromisos y los pocos que se logran no siempre se cumplen”.
Crecimiento y reformas
Durante la presentación, el Presidente también ocupó varios minutos para hablar del crecimiento y las reformas en curso. “Las últimas cifras económicas que hemos conocido nos confirman que la economía chilena está en un lugar distinto al que se le había asignado”, aseguró.
Por lo mismo, añadió que “a dos años de iniciado nuestro Gobierno quiero convocarlos a metas ambiciosas que no pueden ser logradas si caminamos por separado. Identifiquemos, entonces, metas concretas y desafiantes para el término de nuestro periodo los próximos dos años”.
Y las detalló: la primera, una economía que crezca “a un ritmo superior al de los 8 años precedentes (1,9%) y en la cual todos juntos nos rebelemos ante el pronóstico que veíamos en los últimos días de que la próxima década va a tener un promedio de crecimiento del 2% de la economía chilena. Chile puede más y lo podemos conseguir si trabajamos en conjunto”.
Sobre el crecimiento, acotó que “me parece que es tan importante, quiero ser claro, porque sé que no basta con que uno diga que es importante si no te creen al frente que uno cree que es importante. Entonces, ¿cuál es mi visión respecto al crecimiento? No veo al crecimiento desde una perspectiva del chorreo, que pareciera ser un concepto que ha resurgido en estos últimos años”. Para Boric, “el crecimiento es una base necesaria para poder contar con los medios materiales para que, a través de buenas políticas públicas, seamos capaces de nivelar la cancha en la economía. Agrandar la torta y, a la vez, repartirla de manera más justa”.
Asimismo, mencionó, “una inflación que esté en línea con la meta del 3% establecida por el Banco Central, la creación de 700 mil empleos, ya llevamos más de 460 mil. Ojalá todos o la gran mayoría de ellos empleos formales, que reduzcamos la pobreza a cerca del 5% de 6,5 lo que es inferior a donde estábamos pre pandemia, que era 8,5 o 8,6. Pero podemos seguir bajando y eso es mejorar la calidad de vida de nuestro pueblo”.
También planteó metas en seguridad social; una de ellas es “sentar las bases construidas sobre otras de gobiernos anteriores de un sistema de bienestar social que elimine el riesgo de la pobreza en la vejez, con pensiones que sean equivalentes, al menos, a un 75% de las últimas remuneraciones”, dijo.
En cuanto al pacto fiscal, destacó el trabajo de cerca de un año, “para generar una agenda robusta, equilibrada y concreta de iniciativas que nos permitan generar recursos para poder responder a las necesidades más apremiantes de la ciudadanía de manera responsable”. En ese escenario, dijo que “el resultado fue una agenda, no de una medida, no de una reforma tributaria, sino de 36 medidas de impulso al crecimiento, 12 iniciativas de reforma del Estado y 30 medidas para elevar el cumplimiento tributario”.
Detalló que estas “quedan reflejadas en 14 proyectos de ley, gran parte de los cuales se encuentran actualmente en discusión en el Congreso Nacional”. Entre ellas mencionó la modernización del Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental y también la Reforma al Sistema de Permisos Sectoriales, liderada por el ministro de Economía Nicolás Grau”.
Y por último envío un recado al Congreso: “Quiero aprovechar esta oportunidad para proponerle al presidente del Senado y también a la presidenta de la Cámara de Diputados y Diputadas para que concordemos un mecanismo, tal como lo hicimos en materia de seguridad, para acelerar la tramitación de estos proyectos de modo que todos se encuentren aprobados antes de la próxima discusión presupuestaria. No me cabe ninguna duda que aquello daría certezas y nos permitiría despegar”.