Aunque los mercados brasileños repuntaron ayer por la tarde, la apertura en rojo respondió al liderazgo que alcanzó el candidato de Lula da Silva, Fernando Haddad, en los sondeos para la segunda vuelta presidencial, a menos de dos semanas de que los votantes se dirijan a las urnas para definir quiénes llegaran al balotaje.
Los operadores están preocupados por el regreso de un gobierno petista, en función del programa gubernamental del Partido de los Trabajadores, donde proponen deshacer las reformas pro-mercado, introducir controles de capital y ofrecer créditos baratos para el consumo de combustible.
El ex alcalde de Sao Paulo vio aumentar su apoyo en la primera ronda tres puntos porcentuales, a 22% en la encuesta de Ibope. En tanto, el ex paracaidista Jair Bolsonaro se mantuvo a la cabeza con un 28%, pero su índice de rechazo subió de 42% a 46%. De esta manera, en un escenario de segunda vuelta entre los dos, Haddad vencería al postulante de ultraderecha por seis puntos porcentuales.
"El mercado reflejará gradualmente la comprensión de que Bolsonaro enfrentará a Haddad en la segunda ronda, y Haddad tiene la ventaja para conseguir las alianzas", dijo Danny Fang, analista de Banco Bilbao Vizcaya Argentaria SA en Nueva York.
De acuerdo al estudio, Bolsonaro perdería ante todos sus potenciales competidores en una probable segunda vuelta el 28 de octubre.