Desde propiedades hasta maquinarias y vehículos. La tradicional puja por equipos y activos que normalmente son rematados en medio de paletas levantadas al aire por parte de los compradores habituales, tuvo que trasladarse a salas de reuniones virtuales. Y es que la crisis sanitaria obligó a modificar todas las maneras tradicionales de operar, dejando de lado los encuentros físicos para dar paso a la reinvención necesaria para adaptarse a la nueva realidad que imponen los tiempos del coronavirus.

Si bien era algo que las empresas del rubro ya venían implementando hace años, la llegada del Covid-19 aceleró el tránsito hacia la modalidad de subastas 100% online. Este cambio permitió a las compañías sostener los niveles de ventas previo a la crisis.

El gerente general de Tattersall GDA, Pablo Stevenson, cuenta que en los últimos dos meses han tenido mucha actividad en materia de subastas de maquinarias y vehículos. Entre esos casos, se ha visto a empresas que se acercan buscando liquidez para enfrentar eventuales situaciones.

En este segmento, señala Stevenson, “trabajamos con muchísimas empresas-compañías mineras y empresas que dan de baja flotas de automóviles-, y hemos tenido un marzo y abril, incluso, mayo, bastante activo. Desde enero a la fecha hemos vendido más de 1.500 vehículos, sobre 300 vehículos mensuales, lo cual es aproximadamente lo que nosotros hemos generado históricamente en ventas”, comenta.

En su opinión, al tratarse de bienes “que se mueven de una manera más rápida”, dice, el mercado ha visto oportunidades en esta modalidad de venta. Por otra parte, sostiene que “hoy la prioridad es la liquidez” para las compañías y que en ese sentido, “se han apurado decisiones en algunos casos”. Sin embargo, señala que todavía no se ha visto una diferencia de precios respecto al año pasado.

En cuanto a propiedades -la empresa subasta viviendas, sitios industriales y parcelas-, Stevenson cuenta que hay ralentización de remates ligados a liquidación concursal. “Hasta el minuto no hemos notado una mayor oferta. Puede estar dado, incluso, porque producto de la pandemia la Superintendencia de Insolvencia y Reemprendimiento ha postergado muchos plazos, porque hay mucho trámite que no se puede hacer. La sensación que tengo es que cuando esto se normalice puede producirse un aumento en los procesos de liquidaciones, pero no porque aparezcan más liquidaciones -aunque sí pueden aparecer- sino porque hay mucho proceso que está en este minuto estancado”, señala.

Macal, compañía que hace años comenzó un proceso para transformarse en un portal de ventas online de propiedades y vehículos, también dejó de realizar subastas físicas. De hecho, su gerente general, Sebastián Calvo, cuenta que desde ahora todos los remates pasarán a ser 100% online y pondrán fin al formato mixto.

De acuerdo con cifras de la compañía, la participación online en las ventas de propiedades venía creciendo fuertemente en los últimos años, pasando de 42% en 2018, a 65% en 2019 y a 96% este año. En el segmento de vehículos, en abril de este año comercializaron 370 unidades y las ventas alcanzaron los US$2,7 millones, por sobre los 299 autos por un total de US$2,3 millones que registraron en igual mes de 2019.

En propiedades, la venta alcanzó los US$6,3 millones, por debajo de los US$8,7 millones que registraron en igual mes del año pasado. Si en abril de 2019 vendieron 179 inmuebles, este año la cifra fue de 130.

“En autos, hemos tenido un incremento en los últimos dos meses de compradores de 10%-15%”, dice Calvo. También señala que en vehículos comerciales (furgones, transporte personas y camionetas) los precios han caído en 10% promedio.