En el segundo Informe de Política Monetaria (Ipom) del año y el primero con el nuevo gerente de División de Estudios, Elías Albagli, el Banco Central decidió alinearse con el optimismo del mercado en materia de actividad.

El ente rector, liderado por el economista Mario Marcel, decidió aumentar en casi un punto porcentual su estimación para la inversión en 2018 respecto al Ipom anterior, pasando de 3,6% a 4,5%, situación que también lo llevó a acotar al alza su rango de estimación de crecimiento económico para el presente ejercicio, a 3,25%-4%.

¿Las razones?

El presidente del BC explicó que la decisión del Consejo se justifica dado que "la actividad y demanda indican que se ha afianzado el proceso de recuperación de la economía que se empezó a ver a mediados de 2017, de hecho la actividad ha avanzado algo más rápido de lo que habíamos previsto en marzo".

Asimismo agregó que "la recuperación de la economía se apoya en un escenario externo favorable, una política monetaria claramente expansiva, el fin del ajuste en la inversión minera y habitacional y la ausencia de desbalances macroeconómicos importantes".

En cuanto a la inversión, Marcel destacó el comportamiento de la formación bruta de capital fijo que creció 3,6% en el primer trimestre, "con un componente de construcción y otras obras que retomó tasas de expansión positivas luego de casi dos años".

Aún así, advirtió que "algunos antecedentes sugieren que es temprano para asegurar un dinamismo relevante de la inversión, en particular porque aún no se observa un cambio importante en la ejecución de proyectos de gran envergadura".

Normalización de la tasa

El BC elevó su estimación para la inflación a diciembre de este año de 2,3% a 2,8%, cifra que también se ubicaba por debado de las estimaciones del mercado, luego de las mayores presiones de precios en los últimos meses.

Con estos antecedentes, el instituto emisor entregó más luces respecto al camino que seguirá la Tasa de Política Monetaria (TPM), luego de que el jueves diera cuenta de un leve cambio de sesgo al alza, al reconocer que la tasa "comenzará a reducirse" en la medida en que las condiciones macro sigan impulsando la inflación.

Ayer, Marcel enfatizó que el Consejo considera como supuesto de trabajo en el corto plazo "una trayectoria similar a la que muestra la Encuesta de Operadores Financieros (EOF)", sondeo que prevé que el próximo movimiento de la TPM se concrete en diciembre de este año a 2,75%, viendo otro para junio del 2019, dejándola en 3%.

En cuanto al mediano plazo, el Ipom señala que se espera que la tasa regrese a su nivel neutral hacia el 2020, nivel que la entidad plantea entre 4 y 4,5%. En su exposición del informe y evitando de hablar de sesgos, Mario Marcel explicó que en función del riesgo a la baja de la inflación que existía y que pudiese comprometer la convergencia hacia el 3%, "mantuvimos una referencia a la posibilidad de una tasa algo más expansiva para compensar ese efecto, en la medida que ese riesgo ha ido desapareciendo, por lo tanto la probabilidad de requerir una tasa algo más expansiva, también se va reduciendo".