Preocupados quedaron los parlamentarios tras la primera presentación del Consejo Fiscal Autónomo (CFA) ante la Comisión Mixta de Presupuestos, en la cual se presentó un frío diagnóstico de la metodología de la regla de balance. Y en ese contexto, el titular de este grupo, Jorge Desormeaux explicó que desde que fue creado este sistema, los ingresos estructurales han sido más altos, en promedio, que los ingresos efectivos, en 0,5% del Producto Interno Bruto (PIB).
"Los ingresos estructurales y efectivos en el mediano plazo, en promedio, debieran ser equivalentes. En este caso detectamos que, en general, los ingresos estructurales han sido como medio punto del PIB superiores en promedio a los ingresos efectivos ypor tanto, de gastos estructurales, lo que acumulado da lugar a un mayor gasto de 8 puntos del PIB, lo que se transformó en mayor deuda también de 8 puntos", afirmó el economista.
A este "sesgo en las estimaciones" sumó un problema con la prociclicidad de otras variables que se utilizan para medir el balance.
Por ejemplo, en el caso de las proyecciones de los ingresos del cobre acotó que sólo se considera a las 10 empresas más grandes de la minería privada, que representan al 74% de la producción, es decir se excluye al 26% restante, que es un "componente significativo" afirmó. También hay otros ingresos tributarios como donaciones, rentas de la propiedad, ingresos de operación, que representan en torno al 10% del total que no son ajustados estructuralmente, pero que sí se mueven respecto del ciclo.
Expuesto el análisis, Desormeaux detalló los planes para evaluar la metodología con la contratación de varios estudios, con tal de proponer en 2020 algunos perfeccionamientos.
"Esta ha sido una campanada importante (...) No sólo nos entrega datos interesantes, sino que además nos señala que no podemos seguir sobreestimando ingresos", apuntó el senador José García (RN).
