China y EEUU declararon realizar avances en las negociaciones para poner fin a su guerra comercial, con el presidente Xi Jinping presionando para lograr una rápida conclusión y el presidente Donald Trump hablando de las perspectivas de un acuerdo "monumental" que aún puede tardar algunas semanas.
A través de un mensaje enviado a Trump a través del viceprimer ministro Liu He, Xi pidió una pronta conclusión de las negociaciones y dijo que se necesitaba un liderazgo estratégico para garantizar relaciones sanas y estables entre EE.UU. y China, dijo la agencia oficial de noticias Xinhua. Liu, quien participó en las conversaciones esta semana en Washington, dijo que ambas partes habían "llegado a un nuevo consenso sobre temas tan importantes como el texto" de un acuerdo comercial, según Xinhua.
Trump dijo que cualquier acuerdo comercial con China probablemente tardaría unas semanas, aunque ambas partes estaban avanzando en un acuerdo que podría ser "muy monumental".
"Tenemos un camino por recorrer", dijo Trump a los periodistas en una reunión el jueves con Liu en la Casa Blanca. "Estamos cerca de la meta", agregó.
Liu se reunió con el presidente Trump tras dos días de conversaciones entre negociadores comerciales chinos y estadounidenses en Washington. Trump no anunció una cumbre con Xi, reunión que el presidente estadounidense ha calificado como fundamental para concretar un acuerdo. Hace un mes, Trump promocionaba la idea de realizar una "cumbre de firmas" con Xi, con asistentes que sugirieron que la reunión podría realizarse en el resort Mar-a-Lago de Trump en Florida.
"Si llegamos a un acuerdo, tendremos cumbre", dijo Trump. Podría tomar cuatro semanas armar un marco para el acuerdo y dos semanas más para obtener los detalles en papel, dijo.
Los comentarios de Trump prolongan la incertidumbre sobre si las dos economías más grandes del mundo pueden terminar su guerra comercial de nueve meses que ha interrumpido cadenas de abastecimiento, azotado los mercados y afectado a la economía mundial. La directora gerente del Fondo Monetario Internacional, Christine Lagarde, advirtió esta semana a ambos países que evitaran la herida "autoinfligida" de un prolongado conflicto comercial.
"Trump está presionando a China en la última etapa de las conversaciones, al solicitar que ofrezca mayores concesiones en la apertura del mercado y fortalezca la supervisión sobre el cumplimiento de las promesas", dijo Li Yishuang, un economista establecido en Shanghái de China Securities Finance Co., especializado en comercio internacional. "Pero todos estos problemas están en el nivel de implementación. Todavía es probable que se llegue a un acuerdo, en principio, para fines de abril".
Las acciones japonesas y los futuros de acciones estadounidenses se elevaron, junto a los rendimientos de los bonos del Tesoro, tras las declaraciones entre China y EE.UU. Los volúmenes comerciales de Asia se enmudecieron, con China y Hong Kong cerrados por un feriado. Los futuros europeos variaron levemente.
Un funcionario de la administración, quien habló bajo condición de anonimato, dijo que las conversaciones continuarán en Washington el viernes. No hay un calendario para nuevas negociaciones después de eso, dijo el funcionario.