En una Oficina Oval colmada de periodistas y funcionarios de gobierno, el vicepremier de China, Liu He, y el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmaron ayer el pacto que formaliza la primera distensión de la guerra comercial. Se trata de una noticia que, pese a no implicar un final definitivo de las hostilidades, mejora las perspectivas de la economía tanto mundial como local.

De hecho, mientras en Wall Street el S&P 500 alcanzaba un nuevo récord al acumular un alza de 10,6% desde que se anunció el pacto parcial en octubre, en Chile las autoridades locales no demoraron en pronunciarse.

"Va a significar un mayor consumo de cobre y un mayor consumo de minerales y eso va a traer noticias positivas para Chile", indicó el ministro de minería Baldo Prokurica, quien destacó que "la opinión en general es que el cobre va a tener un precio similar a los US$3 la libra, si estas condiciones se mantienen".

Ayer el metal rojo cerró su cotización en US$2,82 la libra y desde que se anunció los acercamientos entre las dos potencias, ha aumentado su precio en 8,4%. Con la mirada en China y sus efectos en el cobre, el ministro de Hacienda, Ignacio Briones, señaló por su parte que "es una muy buena noticia para el país, para los ingresos fiscales".

Después de todo, el hito de ayer, contempla varios compromisos (revisar listado de "claves del pacto") y consolida una tregua, va a durar por lo bajo un año. "Estamos dejando los aranceles, pero estaré de acuerdo en quitarlos si somos capaces de hacer la fase dos. En otras palabras, estamos negociando con los aranceles", indicó ayer el mandatario estadounidense, quien previamente había señalado que prefiere esperar "hasta después de las elecciones", para dar continuidad al dialogo con el gigante asiático.

En efecto, lejos de estar interesado en tensar nuevamente a los mercados internacionales con su proteccionismo, Trump volcará toda su atención en las elecciones presidenciales del 3 de noviembre de este año, proceso en el que pretende su reelección.

De hecho, la firma del acuerdo fue seguida de cerca por los demócratas. Joe Biden, el candidato opositor predilecto de los mercados, criticó al Presidente señalando que "China es el gran ganador". Antes de la conferencia de prensa en la Casa Blanca, el exvicepresidente de Barack Obama indicó que "fiel a su forma, Trump está obteniendo muy poco a cambio del dolor significativo y la incertidumbre que ha impuesto a nuestra economía, agricultores y trabajadores".

En ese marco, Jon Cowley, analista senior de comercio internacional de Baker McKenzie en Hong Kong, sostuvo a sus clientes que "el acuerdo de la fase uno es un paso en la dirección correcta, pero hará poco para sacudir la percepción generalizada de que la incertidumbre comercial es la nueva norma".