China y EEUU lograrán "pronto" un acuerdo comercial y la directora financiera de Huawei, Meng Wangzhou, retenida en Canadá, "será liberada en torno a abril", pronosticó un asesor del Partido Comunista de China (PCCh) en declaraciones que recoge hoy el diario South China Morning Post.
De acuerdo con Xie Maosong, asistente de la Secretaría General del Instituto para la Innovación y el Desarrollo Estratégico de China, las tensiones entre los dos países comenzarán a aliviarse en marzo con los consensos que se alcancen en Washington esta semana.
"Debería haber algún tipo de acuerdo para marzo, y Meng será liberada en abril o mayo", dijo Xie al término de una conferencia anual organizada por el rotativo hongkonés.
Meng fue arrestada el pasado diciembre en Vancouver a petición de las autoridades estadounidenses, que buscan presentar cargos criminales contra Huawei y la directiva por supuesto lavado de dinero, fraude bancario y robo de secretos comerciales.
Las declaraciones de Xie se producen poco después de la llegada a la capital estadounidense del viceprimer ministro chino Liu He para resolver la guerra comercial.
Liu ya encabezó la delegación china que viajó a Washington a finales de enero y se reunió con el presidente estadounidense, Donald Trump, aunque se desconoce si volverá a hacerlo en esta ocasión.
Esta será la cuarta ronda de negociaciones de alto nivel entre ambas partes y terminará justo una semana antes de que finalice el plazo acordado para sellar un pacto definitivo, el 1 de marzo.
"Estados Unidos no va a levantar ahora todos los aranceles que impuso porque pretende dejar espacio para la negociación", dijo Xie y añadió que, aunque es posible que haya otra ronda de negociaciones, "para junio las tarifas desaparecerán".
De acuerdo con el asesor, para China lo importante ahora es "ganar tiempo" porque Trump buscará un acuerdo en junio a fin de afrontar con garantías su reelección a finales de año.
"Trump dirá que las fricciones entre los dos países se resolvieron gracias a él", apuntó Xie.
Asimismo, indicó que China está dispuesta a hacer concesiones comerciales pero que "no va a ser tan flexible" en cuanto a los cambios estructurales que pide Washington.
"Estados Unidos ganará en materia comercial, pero tendrá que ceder en cuanto a ese asunto", señaló el asesor, que se mostró menos optimista sobre la futura relación entre las dos potencias.
"El ascenso de China es una pesadilla para Estados Unidos, no porque China vaya a convertirse en un factor impredecible tal y como ha dicho la parte estadounidense, sino porque para ellos significaría perder la hegemonía en muchas áreas", estimó.
Según Xie, China "no competirá" directamente con Estados Unidos "pero tampoco retrocederá" y buscará un "punto intermedio".
Trump y el presidente chino, Xi Jinping, acordaron una tregua de 90 días el 1 de diciembre de 2018, lo que significó la suspensión temporal del aumento del 10 % al 25 % de los aranceles estadounidenses a productos chinos por valor de 200.000 millones de dólares.
Los principales problemas planteados por el Gobierno estadounidense son la protección de la propiedad intelectual, la transferencia forzada de tecnología, los subsidios de Pekín a las compañías locales que generan desigualdades con las empresas foráneas, los robos cibernéticos, los controles cambiarios o el acceso al mercado del gigante asiático.