El Banco Popular de China (BPC) ha llevado a cabo este lunes una inyección de 700.000 millones de yuanes (unos US$ 100.000 millones) a través de la facilidad de préstamos a medio plazo (MLF) del banco central con el fin de aliviar las presiones de liquidez de las entidades ante los vencimientos de líneas de préstamo por importe de 550.000 millones de yuanes (66.885 millones de euros) este mes y mantener el impulso de la recuperación de la economía.
De este modo, el banco central chino proporcionará 700.000 millones de yuanes a los bancos del país durante un plazo de doce meses a un tipo de interés del 2,95%, en línea con la tasa aplicada en anteriores operaciones, compensando más que de sobra el vencimiento este lunes de 400.000 millones de yuanes (unos US$ 57.636 millones) y de otros 150.000 millones de yuanes (US$ 21.610 millones) el próximo 26 de agosto.
En un comunicado, el BPC indicó que con esta inyección de fondos se aborda "la renovación de dos operaciones anteriores de préstamos a medio plazo que vencen este mes, satisfaciendo plenamente las necesidades de las instituciones financieras".
Además de la línea de liquidez a un año, el banco central chino ha llevado también a cabo una operación de recompra inversa o ‘repo’ por la que ha inyectado 50.000 millones de yuanes (unos US$ 7.200 millones) a las entidades bancarias, que deberán devolver este dinero dentro de una semana. El interés aplicado a esta línea de liquidez ha sido del 2,20%.
La nueva inyección de fondos a las entidades comerciales chinas llega después de que la semana pasada los datos de producción industrial y ventas minoristas de China quedasen por debajo de las expectativas, sugiriendo un cierto enfriamiento en el ritmo de recuperación del país tras el rebote de la economía en el segundo trimestre.
En el caso de la producción industrial, en el mes de julio registró un crecimiento interanual del 4,8%, en línea con el incremento observado en junio, después de cuatro meses de aceleración de la actividad en el sector, tras el desplome del 13,5% en los dos primeros meses de 2020. En el conjunto de los siete primeros meses del año, la producción industrial china se encuentra un 0,4% por debajo del mismo periodo de 2019.
Por su parte, el volumen del comercio minorista chino en el mes de julio alcanzó un importe de 3,22 billones de yuanes (unos US$ 460 millones), lo que representa una caída interanual del 1,1%, después de la bajada del 1,8% del mes anterior, lo que implica que el dato referente al consumo doméstico chino se ha mantenido en negativo todo el año 2020, con una caída del 9,9% en los siete primeros meses.