Cerca de cien durmientes manufacturados con plástico reciclado fueron instalados en las vías ferroviarias de la División Chuquicamata, en un proyecto piloto innovador que materializa los esfuerzos de Codelco en materia de economía circular y desarrollo sostenible.

Los EcoDurmientes, desarrollados por la empresa chilena Morpet, provienen de la revalorización de más de 17 toneladas de plástico provenientes de tuberías de HDPE (polietileno de alta densidad) en desuso. Estas tuberías, antes consideradas residuos, fueron transformadas en más de 180 durmientes, de los cuales aproximadamente un centenar están actualmente instalados.

“Estamos generando una economía circular que da sustentabilidad a nuestras operaciones y a la comunidad en la cual estamos inmersos”, comenta Cristián Herrera, quien ha tenido un rol clave en el piloto desde su cargo de superintendente de Servicios a la Producción y Logística de Chuquicamata. “Tenemos que ser capaces de visualizar nuevas formas de reutilizar lo que anteriormente considerábamos un desecho. Hoy, con este proyecto, podemos decir que es posible y sin grandes inversiones”, agrega.

Por su parte, el gerente general de la división, René Galleguillos, explica que “uno de nuestros objetivos estratégicos es promover un Chuquicamata sustentable y parte de la comunidad, donde iniciativas como el reciclaje y la economía circular forman parte de los planes de implementación que materializan este objetivo. Felicito a los equipos por impulsar estas ideas innovadoras que contribuyen a reducir nuestros impactos y crear valor al negocio”.

Más sustentables, duraderos y económicos

Según relata Herrera, los EcoDurmientes están hoy instalados en el tramo denominado “curva de la esfera”, donde se requieren durmientes más durables que los tradicionales de madera debido a las condiciones de uso a las que están expuestos.

La tecnología de los EcoDurmientes —la cual fue validad por científicos(as) de la Universidad de Chile y la Universidad Técnica Federico Santa María— está diseñada para asegurar una alta durabilidad, explica Felipe Aravena, Coordinador Comercial y de Negocios de Morpet.

En zonas críticas, las alternativas de madera deben ser reemplazadas cada 1,5 años, mientras que los EcoDurmientes tienen una vida útil de hasta 15 años. En condiciones o tramos de vía normales, puede extenderse hasta 60 años. Esto implica una disminución significativa en los costos de mantenimiento y reemplazo, lo que impacta directamente en la continuidad operacional de la faena. Por esta y otras razones, Morpet calcula que los costos de utilizar durmientes de madera pueden ser hasta un 200% mayores que los de los EcoDurmientes.

Los EcoDurmientes son, además, productos 100% reciclables: al finalizar su uso, pueden ser procesados e incorporados nuevamente en la fabricación de durmientes ferroviarios, u otros elementos requeridos en las operaciones.

“Este tipo de iniciativas son un ejemplo real, concreto, de nuestro propósito: ser pilar del desarrollo sostenible de Chile y el mundo. Seguiremos potenciando la economía circular con proyectos innovadores, que agregan valor a la Corporación desde una visión responsable con el medioambiente”, cierra Rubén Alvarado, presidente ejecutivo de Codelco.