Este sábado finalizaron los diálogos sociales y las audiencias públicas para la reforma tributaria, una instancia que el gobierno considera clave para darle un respaldo ciudadano al proceso y generar certezas.
La subsecretaria de Hacienda, Claudia Sanhueza, ha estado encabezando este trabajo y dice que a mediados de mes se entregará un documento donde estarán sistematizadas las distintas propuestas y temas que aparecieron en este trabajo que comenzó a fines de abril.
Sobre las dudas que existen entre los expertos sobre si se podrá lograr la recaudación del orden de 4 puntos del PIB, la economista sostiene que se están “corroborando todas las estimaciones de recaudación esperada con los datos del Servicio de Impuestos Internos. Hay un equipo de economistas y de abogados tributaristas que están analizando los datos reales, entonces vamos a tener datos de recaudación bien estimados”. La reforma tributaria se presentará el 30 de junio.
¿Qué balance hace de los diálogos sociales y de las audiencias por reforma tributaria?
El proceso fue fructífero. Recorrimos todas las regiones del país. Este trabajo se separó en dos: por un lado, los encuentros ciudadanos y, por otro, las audiencias públicas. Será un aporte para el diseño de la reforma tributaria. Además, el tema tributario ha sido muy inestable durante los últimos años, entonces para que se transforme en algo estable y entregue certezas al país, necesita tener una base ciudadana bien robusta. Uno de los mecanismos para lograrlo fue este proceso participativo.
¿Quién procesará el contenido de los diálogos tributarios? El ministro Mario Marcel dijo que no será Hacienda, sino un organismo especializado.
Tenemos un equipo metodológico con consultores especialistas y en el equipo tributario de Hacienda también hay personas que están a cargo de este trabajo de sistematización de las audiencias y diálogos sociales. La idea es publicar el informe a mediados de junio.
¿Cuánto de las propuestas que se presentaron se considerarán en el diseño de la reforma? ¿Cómo se integrarán?
Cuando iniciamos este proceso les dijimos a quienes participarían en estos encuentros y audiencias que se refirieran a principios del sistema tributario para poder luego identificar los instrumentos. Y sobre esos principios irá la reforma tributaria. De hecho, tenemos algunos resultados preliminares y hay materias que no teníamos contemplado incorporar, pero ahora, luego de este trabajo, las consideraremos.
¿Cómo cuáles?
Hubo tres temas que aparecieron de manera importante entre la ciudadanía que participó. Uno tiene que ver con la necesidad de conocimiento tributario. Algo tan simple como el saber qué impuestos pagamos, qué financian nuestros impuestos. Lo segundo es un tema de transparencia en el uso de los recursos. Si bien como país tenemos una agenda de transparencia e información, hay que fortalecerla y difundir en qué se usan los recursos públicos. El tercero es una demanda de las regiones por una mayor equidad territorial.
En cuanto a las audiencias donde expusieron expertos, académicos y gremios empresariales, ¿en qué temas hubo consensos y en cuáles hubo reparos?
En algunos temas aumentó el consenso. Por ejemplo, en el combate contra la elusión y evasión de impuestos y la eliminación de las exenciones. Eso es muy transversal. También subió el consenso en que el país tiene que recuperar más de sus rentas relativas al cobre. También vimos que hay acuerdos en la idea de desintegrar el sistema, principalmente por una necesidad de simplificación. Creemos que eso será un principio muy importante: simplificación.
Si bien puede que haya un mayor consenso en que se debe aplicar un mayor impuesto a las mineras, donde no lo hay es en la forma de hacerlo. Los representantes del sector minero critican la idea del actual proyecto de aplicar un impuesto ad valorem y han planteado como propuesta modificar la escala del impuesto específico a la minería. ¿Ese planteamiento se considerará en el proyecto?
Estamos evaluando todavía la forma en que se realizará. Es probable que nuestro proyecto se construya sobre la base de lo que está en el Senado. Es probable que se modifique ese proyecto para hacerlo más compatible con las metas de recaudación. No puedo adelantar más, porque se está diseñando aún.
Otra de las materias que estuvo presente en los diálogos y que en general no cuenta con apoyo entre los expertos es el impuesto a la riqueza. ¿Se tiene ya planificado cómo se implementará?
Hay desafíos respecto al impuesto a la riqueza que tienen que ver con hacerlo eficiente. Pero también tenemos buenos ejemplos de países que tienen impuesto a la riqueza que logran recaudar más y ser eficientes. Pero por otro lado tenemos el desafío de la progresividad y también de gravar las rentas de las distintas fuentes. Cuando los países no gravan todas las rentas de las distintas fuentes provocan una falta de legitimidad del mismo sistema tributario, que para las personas es la justicia tributaria. Se deben pagar los impuestos de acuerdo a los ingresos que tienen las personas.
Hay dudas entre los expertos de que efectivamente recaude el 0,5% del PIB esperado. ¿Se mantiene esa proyección?
Eso lo vamos a presentar en su momento. Es una cifra que está en revisión, podría ser distinto. No me quiero adelantar.
¿Y su implementación para llegar a recaudar el 0,5% del PIB será gradual?
Toda la reforma tributaria tiene mecanismos de gradualidad, porque esa es la forma de hacerlo bien, para generar adaptación al nuevo sistema. Gradualidad y simplicidad son dos temas necesarios dada la experiencia que hemos tenido antes para hacer una buena reforma tributaria y que permanezca en el tiempo por varios años.
La reducción de la evasión y elusión es uno de los ítems más importantes de la reforma tributaria en cuanto a recaudación. Según lo que se ha dicho, se pretende recaudar el 1,2% del PIB en cuatro años. ¿Esa meta se mantiene? ¿Es posible de lograr?
Hemos estado trabajando con el Servicio de Impuestos Internos y con los servicios relacionados como Aduanas. Queremos fortalecer los entes fiscalizadores, además de poder dotar a los mismos servicios de una normativa que los acompañe para hacer su labor.
El gobierno ya ha descartado la posibilidad de ampliar la base tributaria para el impuesto a las personas. ¿Se tiene definido el diseño para modificar los tramos que se aplican?
Lo primero que se debe decir es que la base tributaria ha ido aumentando en el tiempo. A medida que el país crece, cada vez menos personas están exentas y eso lo vamos a mostrar en la discusión. En los últimos 20 años, los contribuyentes exentos han bajado desde el 85% al 75%. El tema de la base se irá solucionando a medida que los ingresos de las personas vayan subiendo.
¿Desde qué monto se subirá la tasa de impuesto a las personas? El director del SII, Hernán Frigolett, dijo que para atacar al 10% de mayores recursos se debería apuntar al tramo desde los $ 8 millones hacia arriba.
Esos son detalles que todavía están en el diseño, pero apuntan a la progresividad del sistema tributario.
¿El 40% como tasa máxima para las personas se mantiene?
Eso lo vamos a responder cuando se presente la reforma.
Otra de las materias que apareció en las audiencias fue la duda que existe entre los expertos de que se puedan recaudar los 4 puntos del PIB en cuatro años, considerando la experiencia de la reforma de Michelle Bachelet. ¿Qué hace pensar que ahora se podrá recaudar lo esperado?
Estamos haciendo un trabajo muy minucioso técnicamente para lograr cumplir con nuestras metas de recaudación, y esperamos que en el diálogo público y parlamentario nos pongamos de acuerdo como país en la necesidad de avanzar en estos mayores ingresos. Estamos corroborando todas las estimaciones de recaudación esperada con los datos del Servicio de Impuestos Internos. Todo eso estará documentado. Hay un equipo de economistas y de abogados tributaristas que están analizando los datos reales, entonces vamos a tener datos de recaudación bien estimados. Otro punto que ayuda a la recaudación es la simplificación del sistema. Esta reforma no puede ser una que complejice el sistema.
Finalmente, ¿se tiene decidido de qué forma se agruparán los proyectos y cuáles ingresarán primero?
Habrá un proyecto que incluirá impuesto a la renta, riqueza, ingreso de las personas y todo lo relacionado con elusión, evasión y exenciones. Otro del royalty y un tercero que abordará los temas de impuestos verdes, pero ese se ingresará a fines de año.
¿Qué le parecen las declaraciones del presidente de los empresarios, Juan Sutil, quien mostró sorpresa por el hecho de que la reforma tributaria ingresará en junio?
Me sorprendieron esas declaraciones. Desde el primer momento hemos dicho que la reforma tributaria se presentaría en junio. Hemos hecho un proceso de diálogo inédito y profundo, no sólo porque involucró transversalmente a muchas personas, sino que fuimos a todas las regiones del país. No somos un ministerio sectorial, vemos todas las políticas públicas y, por lo mismo, nunca había pasado que el Ministerio de Hacienda haya ido a las regiones. Fue un trabajo muy intenso. Requirió de mucho esfuerzo, un diseño impecable. Me enfocaría en lo positivo de este trabajo. Siempre podemos tener más tiempo, los mismos parlamentarios nos han acusado de inacción, pero para nosotros era importante que esta reforma tuviera una base ciudadana. Entonces, tenemos que responder a las necesidades que tiene Chile. Es importante que el país sepa que estamos cumpliendo con los compromisos y lo estamos haciendo de manera participativa.
¿Descarta, entonces, que haya faltado diálogo como lo planteó la CPC?
Las audiencias públicas contaron con la participación de los gremios, incluida la CPC. No sólo en las audiencias públicas, sino que también en las regiones. Ha habido instancia de participación y esperamos que con la entrega de los resultados de los diálogos haya más conocimiento de lo que hemos hecho. Ha habido un proceso de diálogo muy profundo y muy significativo.