El estallido social que se inició el 18 de octubre afectó los resultados de la banca en 2019. Así lo confirmó ayer la Comisión para el Mercado Financiero (CMF), al señalar que "los indicadores de la industria al cierre del año también recogen el impacto de la coyuntura nacional, especialmente los eventos ocurridos a partir del último trimestre del año".
Según el regulador, al cierre de diciembre de 2019, la actividad (colocaciones) creció a una menor tasa respecto de doce meses atrás, los indicadores de riesgo aumentaron y la rentabilidad disminuyó en igual periodo.
Con todo, los préstamos de la banca durante el año pasado subieron un 7,12% en doce meses, lo que se compara con el 9,93% que crecieron en 2018, principalmente por un menor aumento de la cartera comercial y de consumo, acompañado por una caída de los interbancarios.
¿Cuál fue el resultado de los préstamos a empresas? Se desaceleraron desde un 9,18% a un 7,48 % en doce meses, "debido principalmente a un menor crecimiento de los préstamos comerciales, créditos de comercio exterior, entre otros", dijo la CMF.
Por su parte, la cartera de consumo creció solo un 3,93%, en contraste con el 16,86 % de 2018. Eso sí, vivienda creció por sobre el 8%, manteniendo la tasa de doce meses atrás.
Ganancias y riesgo
Cuando se trata de las ganancias de la industria, la utilidad de 2019 fue de US$3.545 millones, lo que significa un alza de 7,29 % respecto de un año atrás.
En los indicadores de riesgo, las provisiones, la morosidad de 90 días o más, y la cartera deteriorada, registraron un aumento respecto de doce meses atrás, "afectados, principalmente, por el crecimiento de los índices de empresas y consumo", puntualiza la CMF.
En ese sentido, agrega que "el mayor índice de provisiones de la cartera comercial, estuvo influenciado en parte, por la implementación de la metodología estándar de la cartera comercial grupal.