Los precios del cobre reaccionaron con una fuerte baja este miércoles ante las preocupaciones del mercado de que el triunfo de Donald Trump en las elecciones presidenciales de Estados Unidos se traduzca en una reversión de las políticas de fomento a la electrificación en la mayor economía mundial.

La cotización al contado del metal, que es altamente demandado en la fabricación de autos eléctricos y la transmisión de energía, cerró con un retroceso de 3,51% a US$4,19596 la libra en la Bolsa de Metales de Londres.

Con ello anotó su menor nivel desde el 17 de septiembre y su mayor caída diaria desde el 5 de agosto cuando bajó 3,97%.

Así el cobre, la principal exportación de Chile, siguió alejándose del máximo histórico de US$4,9247 registrado el 20 de mayo.

En tanto los futuros a tres meses bajaron 3,8%, a US$9.365 por tonelada métrica en la Bolsa de Metales de Londres, en camino de su mayor pérdida intradía en cinco meses. Además, rompió los promedios móviles de 21, 50 y 100 días.

Los precios en la bolsa rival Chicago Mercantile Exchange (Comex) de Estados unidos cayeron aún más. El contrato de cobre más negociado del mes perdió un 4,7%, a US$4,2405 por libra.

Menor demanda en China

La disminución en los precios del metal además fue influida por la incertidumbre sobre un aumento de las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China, el principal mayor consumidor mundial de metales.

“La presión sobre el cobre se debe, en parte, a las preocupaciones de China ante el posible enfoque proteccionista de Trump, que podría incluir aranceles perjudiciales para el comercio con el gigante asiático. Estas tensiones también afectaron las acciones en China, incrementando la inestabilidad en los mercados. No obstante, el primer ministro Li Qiang expresó su confianza en que China cumplirá su objetivo de crecimiento del PIB para el año, respaldado por una serie de políticas implementadas por el gobierno”, dijo Juan Nuñez, analista de mercados XTB Latam.

Inversiones fuera de Estados Unidos

El mercado del cobre está estimando la dirección a largo plazo de las políticas de Trump, dijo una fuente del sector. “Si todo se ha descarrilado, es hora de reevaluar las expectativas de oferta y demanda de cobre”, añadió la fuente.

Trump dijo que “rescindiría todos los fondos no gastados” bajo la Ley de Reducción de la Inflación (IRA), la ley climática emblemática de la administración Biden-Harris para desvincular la cadena de suministro global de China.

La IRA incluye cientos de miles de millones de dólares en subvenciones a vehículos eléctricos, energía solar y eólica para aumentar la producción de minerales estratégicos en el país. Se consideró un incentivo para las inversiones en litio, cobre y níquel fuera de China.

Una victoria de Trump también podría hacer descarrilar la política estadounidense en África, rica en recursos. El gobierno de Biden había planeado previamente casi duplicar sus compromisos financieros en el cinturón cuprífero de la República Democrática del Congo, el segundo mayor productor de cobre del mundo.

El resultado de las elecciones presidenciales en Estados Unidos también se traducía en un fortalecimiento del dólar a nivel global, lo que contribuía a la baja al cobre. Esto porque un dólar más alto encarece el costo del metal para los usuarios de otras monedas haciendo menos atractiva su compra y, por tanto, disminuyendo la demanda.