Los resultados de Codelco, el mayor productor de cobre a nivel mundial, acumulan una caída en lo que va del 2022 y las perspectivas apuntan a un escenario difícil de revertir, al menos para este año, ya que la minera estatal volvió a reducir sus proyecciones de producción del metal.
La compañía registró excedentes por US$2.606 millones (resultado antes de impuesto a la renta y Ley N°13.196) en los primeros nueve meses del año, cifra inferior en US$2.643 millones, es decir de 50,4%, frente a los US$5.249 millones anotados en igual periodo de 2021, debido a menores ingresos operacionales y una baja en la participación en resultados de asociadas.
“El menor precio de realización de ventas, la menor venta de cobre y de subproductos, el incremento de los precios de los insumos y el menor resultado de filiales explican la baja respecto del mismo período de 2021″, señaló la empresa.
“Fueron meses de mucho trabajo, con indicadores de negocio complejos, pero vamos avanzando en la transformación de una empresa comprometida con su futuro”, sostuvo Máximo Pacheco, presidente del directorio de la minera estatal.
Al 30 de septiembre de 2022, la producción total de cobre fino de Codelco, proveniente de sus divisiones operativas y que representa un 82% de los ingresos totales, alcanzó a 1.062 miles de toneladas métricas finas reflejando una disminución de 10% en relación a la producción generada durante el mismo periodo del año 2021.
Dicha producción, sumado el aporte conjunto de las coligadas mineras El Abra y Anglo American Sur alcanzó a 1.136 miles de toneladas.
La disminución de la producción de Codelco, está asociada fundamentalmente a una caída de la ley en División Ministro Hales por cambio de secuencia y una menor recuperación de cobre, sumado a una menor ley, actividad y recuperación de cobre en las concentradoras de División Chuquicamata y División El Teniente.
En los primeros nueve meses del año las ventas físicas totales de cobre propio ascendieron a 1.170 miles de toneladas (procesado en plantas de la minera), principalmente de minerales propios (84%) y en menor proporción de minerales de terceros (16%).
En su conjunto registraron una disminución de 12% en comparación al periodo enero - septiembre 2021. Al respecto, los despachos totales de cobre propio con minerales de Codelco, reflejaron una disminución de 13,3%, en tanto, la venta física de cobre propio con minerales de terceros tuvo una baja de 4,1%.
Si a lo anterior se agrega el cobre comprado a terceros, se alcanza un volumen total de ventas físicas de 1.300 miles de tmf, que en comparación a igual período del año anterior, representa una disminución de 11,7%.
Menor producción
La minera advirtió que en noviembre, la fundición de Chuquicamata comenzará una mantención mayor que incluye la reparación general de la caldera, que ocasiona una importante discontinuidad operacional y acumulación de productos en proceso.
Asimismo, durante el cuarto trimestre, se espera reducir en forma relevante el inventario en proceso. Con esto, la proyección de producción de cobre del año se estima en el rango de entre un 1.465,000 y 1.435.000 mil toneladas.
La cifra es mennor al rango de entre 1.489.00 y 1.509.00 pronosticado previamente y que ya había sido reducido desde las 1.608.000 pronosticadas originalmente.
“Los resultados muestran un momento complejo en términos de mercado, de operación y puesta en marcha de los primeros megaproyectos. Nuestro negocio no es ajeno a las contingencias globales y hemos enfrentado disrupciones operativas mayores, además de las dificultades propias de la puesta en marcha de proyectos, en particular los de minería subterránea. Tenemos a todo el equipo concentrado en superar las dificultades y asegurar un 2023 con el mayor aporte de valor al país. Todas nuestras capacidades y energías están orientadas a eso”, indicó André Sougarret, presidente ejecutivo de la estatal.
Alza en los costos
Los costos directos (C1) llegaron a US$157,4 la libra, con un incremento de 21,2% comparado con el mismo período del año pasado, debido a la menor producción de cobre y de subproductos, y al mayor precio de los insumos.
En tanto, el costo neto a cátodo (C3) alcanzó los US$251,3, lo que representa un alza de 14,5% con relación a 2021, que se explica por las mismas razones que el aumento del C1, además del efecto negativo de la variación del tipo de cambio sobre los pasivos, que fue compensado por menores gastos no operacionales.
“A lo anterior, se suma la importante caída de 12% en el precio de realización de ventas de cobre con respecto a igual período del año anterior, que también afectó el resultado de las principales filiales mineras de la compañía, que explica casi la mitad de la baja de 50,4% en los excedentes” dijo la minera.
Por otra parte, durante el año 2022 el volumen despachado de molibdeno registró una disminución de 12% respecto del año anterior.