Las nuevas tecnologías y la pandemia modificaron la forma en que las personas se relacionan con las empresas de servicios. En la banca, el impacto de este cambio ha sido brutal, graficado en que hoy se realizan, cerca de 450 millones de visitas web en el sistema en promedio en forma mensual, y el cierre de sucursales bancarias es una tendencia extendida por parte de la banca privada.

Hace 10 años el sistema bancario en Chile operaba más de 2.300 sucursales y hoy llegan a poco más de 1.600. La tendencia parece muy razonable y de toda lógica. Sin embargo, cuando profundizamos en las cifras, y nos sumergimos en la realidad geográfica y poblacional de nuestro país, se evidencian preocupaciones importantes que debemos tener en consideración especialmente en BancoEstado que, además de su rol financiero, tiene un rol social y de inclusión financiera.

Del total de 346 comunas de Chile 78 de ellas (23%), hoy no cuentan con sucursales bancarias y sus 600 mil habitantes deben desplazarse a otras localidades cuando requieren realizar algún trámite presencial, con el consiguiente gasto de tiempo y plata. Con CajaVecina resolvemos en parte importante, pero no totalmente, las necesidades de estas personas. Por su parte, hay otras 148 comunas de Chile (alrededor de 43%), donde solo hay una sucursal BancoEstado. Estas comunas concentran una población total de 3 millones 350 mil habitantes.

En las restantes 268 comunas del país, referidas a las ciudades más grandes y con más población, es posible encontrar una oferta bancaria amplia, donde las personas satisfacen de mejor forma sus necesidades financieras de forma presencial. Las grandes ciudades esconden problemas de desigualdad: Vitacura cuenta con 40 sucursales bancarias y Lo Espejo una, donde solo BancoEstado está presente para atender a similar número de habitantes.

Los servicios financieros son esenciales para la vida cotidiana de las personas, organizaciones y empresas de todo tamaño. Pero debemos tener en consideración que la velocidad de penetración de las tecnologías digitales no es la misma en las zonas urbanas que en las rurales y que, además, el factor etario sigue siendo muy relevante a la hora de optar a los canales presenciales o remotos de atención financiera.

En este escenario, mientras sea necesario, BancoEstado seguirá inaugurando sucursales a lo largo del país, en diversas modalidades y coberturas. Por ejemplo, contamos con un modelo de negocio en alianza con los municipios, en el cual operamos en forma eficiente en 63 sucursales BancoEstado y tres oficinas BancoEstado Express, donde los vecinos, emprendedores y organizaciones sociales, realizan sus trámites, administran sus ahorros y resuelven sus necesidades financieras, evidenciando el impacto evidente que una sucursal tiene en la economía local, en la calidad de vida de las personas y en la dignidad de sus habitantes.

Desde un banco público con un visible rol social como es BancoEstado, la ecuación que debemos resolver es en qué localidad del país es necesaria nuestra presencia. Para BancoEstado la respuesta es sencilla, debemos estar donde se requiera disponer de los elementos para alcanzar la inclusión financiera 3.0, esa donde los habitantes de Chile, donde quiera que se encuentren, conozcan y puedan utilizar los servicios financieros, como un mecanismo para su desarrollo pleno.