Columna de Nicole Romo: “Todos quieren ser héroes: ser sostenibles debe ser una responsabilidad, no una moda”

Es cierto que cada día escuchamos más comerciales o discursos en los medios sobre sostenibilidad, sobre la urgencia de asegurar un futuro más verde y las acciones impulsadas por diferentes actores en esta materia. Es como si se tratara de instalar una especie de competencia por evidenciar quién es el mayor héroe para nuestro planeta y las futuras generaciones.

Pero, ¿somos conscientes de que efectivamente nuestras acciones son transformadoras? ¿Podemos hacer más? ¿Qué estamos haciendo para impulsar y visibilizar las iniciativas realmente sostenibles que inspiran, motivan e impulsan a que más personas, empresas, organizaciones se muevan por este triple impacto?

La situación actual del planeta, con las evidentes consecuencias negativas de un modelo que no es sostenible, clama por personas, organizaciones, empresas, comunidades que se hagan responsables y resuelvan ciertos asuntos. Sin embargo, la mirada se posa inevitablemente y con más fuerza, sobre las empresas. Actores sumamente relevantes para la economía, con el poder de transformar realidades e incidir significativamente en el destino de nuestro planeta. Insisto, ¿qué están haciendo? ¿Realizan prácticas realmente transformadoras? ¿Están realmente en el ADN de la empresa o solo responden a la necesidad de mostrar “avances sostenibles”?

Hace un mes vivimos el mayor evento en torno a sostenibilidad empresarial en nuestro país: el Encuentro Sistema B Chile, donde lanzamos el sitio web https://www.practicasempresasb.cl. Se trata de un espacio para visibilizar las prácticas destacadas de las Empresas B que buscan inspirar y motivar a las organizaciones a ser una mejor empresa para el mundo.

En este portal, cada Empresa B Certificada se convierte en un faro, iluminando el camino con su experiencia. Iniciativas de gestión ambiental innovadoras, programas de inclusión social ejemplares, modelos de negocio que generan valor para la sociedad y el planeta; un mosaico de acciones inspiradoras que nos recuerdan que el cambio real sí es posible.

Más allá de ser un llamado de atención, esto es una invitación a la acción. Un llamado a que todas las empresas chilenas se sumen a esta cruzada por un futuro más sostenible. Un llamado a inspirarse en las buenas prácticas; a replicarlas, mejorarlas y construir un ecosistema empresarial donde la sostenibilidad no sea una moda, sino una forma de ser empresa. Sin duda, no necesitamos héroes, sino más bien, necesitamos que cada uno se haga cargo de su contribución al desarrollo de la sociedad y así marcar la diferencia.