Columna sobre el día Internacional del Voluntariado: El valor de entregar tiempo.

El tiempo nunca parece suficiente. Se escapa entre compromisos y pendientes. El tiempo escasea, se agota. Deja poco para la familia, los pasatiempos o los proyectos personales.

Por eso, entregar tiempo parece ser uno de los gestos más valiosos que podemos ofrecer.

Y el voluntariado es precisamente eso: entregar tiempo. Un tiempo que trasciende lo individual y enriquece a quien lo da y a quien lo recibe.

El 5 de diciembre celebramos el Día Internacional del Voluntariado, una fecha proclamada por la Asamblea General de las Naciones Unidas para reconocer el invaluable aporte de millones de personas que dedican su tiempo a transformar comunidades, promoviendo solidaridad y empatía. Según el Programa de Voluntarios de las Naciones Unidas (UNV), más de 1,000 millones de voluntarios contribuyen cada año a causas que impactan positivamente en el mundo.

En Softys junto a TECHO, emprendimos en 2022 el programa de voluntariado Softys Contigo, enfocado en llevar soluciones de agua y saneamiento y educación en higiene a distintos asentamientos en América Latina. Con la meta de beneficiar a 40,000 personas para 2026, hemos movilizado a más de 3,500 colaboradores voluntarios en 8 países, impactando ya a más de 25,000 personas.

A lo largo de este recorrido, hemos visto que cada gesto voluntario abre la puerta a encuentros improbables que transforman realidades, donde tanto los pobladores de las comunidades como quienes se involucran son impactados profundamente. El voluntariado corporativo, por ejemplo, ha permitido que colaboradores de distintas áreas compartan y construyan amistades que trascienden lo laboral.

Esto solo refuerza el poder del hacer de esta alianza, ese hacer que transforma y que también nos transforma. Cada colaborador de Softys, al construir una solución de agua y saneamiento, no solo contribuye al cambio tangible de las condiciones de vida, sino que también lleva consigo la fuerza de la solidaridad, la empatía y el aprendizaje mutuo. Estos voluntarios, sin buscar retribución alguna, han actuado movidos por el propósito de cuidado, reflejando estos valores en las comunidades con las que nos relacionamos.

El voluntariado, motor esencial de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), es un agente de cambio global que combate la pobreza y garantiza derechos básicos como el acceso al agua potable y a saneamiento seguro.

Hoy renovamos nuestro compromiso con esta misión de que nadie viva en un piso de tierra y sin acceso a agua y saneamiento seguros y celebramos a quienes hacen posible este impacto. Porque entregar tiempo no solo transforma vidas: une corazones y nos recuerda el inmenso poder de las alianzas y de permanecer conectados por un bien superior.

Maye Alessandrini

Directora Corporativa de Personas y Organización SOFTYS.

Juan José Ayerza

CEO de TECHO Internacional