Un revés sufrió el gobierno hoy en la discusión del Ingreso Mínimo Garantizado. Esto porque la oposición en comisión mixta logró que se restableciera la discriminación por tamaño de empresas.
Con esto, ahora el Ingreso Mínimo Garantizado quedaría así: para el primer año, todos los trabajadores cuyas rentas brutas sean entre el salario mínimo vigente de $320 mil y hasta $380 mil podrán optar por el beneficio. Sin embargo a partir del segundo año, solo aquellos que laboren en empresas cuyos tope de ventas anual sean hasta los 75 mil UF podrán recibir el aporte gubernamental.
La indicación fue repuesta por el senador Juan Pablo Letelier, y deja por fuera según las estimaciones de Desarrollo Social a más de 200 mil trabajadores.
Ahora el Ingreso Mínimo vuelve a tercer trámite y “dado que se postergó la discusión, ahora el beneficio tendrá que empezar a pagarse en mayo y no en abril como nos habíamos establecido originalmente”, apuntó el ministro de Desarrollo Social.
En tanto, la subsecretaria de la cartera, Alejandra Candia dijo que “estamos satisfechos de haber avanzado en eliminar la discriminación injusta y arbitraria al menos el primer año”.
