Una semana y media se cumple desde la publicación de un audio que reveló conversaciones entre los entre los abogados Luis Hermosilla y Leonarda Villalobos y el empresario Daniel Sauer, controlador del factoring Factop y de la corredora de bolsa STF, donde hablaban de pagos a funcionarios del Servicio de Impuestos Internos (SII) y de la Comisión para el Mercado Financiero (CMF).

Desde el martes de esta semana la atención del caso se volcó hacia la Dirección Metropolitana Oriente del SII. Ese día, pasadas las 14 horas, el director del SII, Hernán Frigolett, informó de remoción de su cargo y de la suspensión del director de la Dirección de Grandes Contribuyentes (DGC), Christian Soto. Sin embargo, rápidamente aclaró que se debía a su rol anterior como director de la Dirección Metropolitana Oriente, y no a su función hasta esa jornada, que había asumido el 1 de octubre de 2022, nombrado por el propio Frigolett. “(Leonarda) Villalobos no operaba en la DGC. La jurisdicción de los Sauer no es Grandes Contribuyentes. La salida de Soto no está vinculada a la Dirección de Grandes Contribuyentes”, apuntó el director ante los diputados de la Comisión de Hacienda.

En esa misma instancia, Frigolett entregó nuevas pistas sobre dónde se estaba focalizando la investigación: la Dirección Metropolitana Oriente, puesto que hay otros cuatro funcionarios que pasaron por esa unidad cuando habría ocurrido la anulación de una multa de $3.000 millones al empresario Sauer, los que también quedaron suspendidos.

En la Dirección Metropolitana Oriente Christian Soto estuvo siete años, entre noviembre de 2015 y octubre de 2022. En su reemplazo asumió María José Castillo, quien antes era la directora de la Dirección Metropolitana Poniente.

Se trata de una de las direcciones regionales más grandes del país. Tiene una dotación total de 376 funcionarios. Abarca las comunas de Providencia, Las Condes, Vitacura y Lo Barnechea, en las cuales tienen su domicilio tributario las empresas más grandes del país y la mayor cantidad. Bajo su competencia territorial están registrados 663.295 contribuyentes. De ellos, 377.239 son personas naturales y 286.056 son empresas.

Por lo mismo, quienes conocen la interna de esa dirección afirman que sus funcionarios están con sobrecarga y siempre juega al límite de los plazos. “Es una dirección muy exigida. Hay una tensión permanente con respecto a las cargas de trabajo, porque existe una sobrecarga. Es una jurisdicción que se requiere fortalecer en términos de dotación”, afirma Paola Tresoldi, presidenta de la Asociación de Fiscalizadores. Esa visión la refuerza Evelyn Apeleo, presidenta de la Asociación de Funcionarios del SII. “En la propuesta de reforma tributaria se plantea la creación de la multijurisdicción, lo que permitiría descomprimir el trabajo”. También dice que se ha propuesto crear otra regional en Santiago, que sería la Cordillera, pero no ha prosperado.

Entre los tributaristas hay coincidencia en que esa dirección tiene una mayor demanda. Si bien sostienen que hay una atención buena, los tiempos de respuesta superan el promedio de otras direcciones. Un exdirector del SII comenta que, “en general, es una dirección que está colapsada. Es donde más se demoran los trámites, dilatan muchas decisiones y esto viene desde hace bastante tiempo. Se ha hecho una ampliación como la unidad de Providencia para descomprimir un poco su gestión, pero eso no fue a la par con un aumento de la dotación”. Y otro extimonel del SII describe que antes era la Dirección Regional Centro la más grande, pero eso comenzó a cambiar desde que las empresas se fueron instalando en la zona oriente, en lo que hoy se conoce como el centro financiero.

Hernán Frigolett, director del Servicio de Impuestos Internos.

La estructura

El SII está constituido por la Dirección Nacional, la Dirección de Grandes Contribuyentes y por las 20 Direcciones Regionales. En total tiene una dotación de 5.014 funcionarios.

En la Región Metropolitana hay cinco direcciones regionales: sur, norte, centro, poniente y oriente. En el resto del país hay una dirección por región. En el organigrama, el director regional se ubica en la misma línea jerárquica que los subdirectores y que el director de Grandes Contribuyentes. Todos ellos, debajo de la supervisión del director nacional.

La Dirección Regional Metropolitana Santiago Oriente está constituida por su sede regional, ubicada en General del Canto 281, Providencia. De ella dependen 8 departamentos y la Unidad de Providencia.

De acuerdo con el SII, las direcciones regionales dependen jerárquicamente del director nacional, sin embargo, funcionalmente, reciben directrices de las distintas subdirecciones, según su ámbito de competencia.

Las direcciones regionales tienen una estructura tipo que puede variar según el tamaño de esta. Esa estructura está dada por un director regional, de quien dependen los Departamentos de Avaluaciones, Fiscalización, Asistencia al contribuyente, Jurídico, Administración y el de Procedimientos Administrativos y, dependiendo del director regional, puede haber unidades. Los directores regionales son las autoridades máximas del servicio dentro de los límites de sus respectivas jurisdicciones territoriales y dependen directamente del director nacional.

Sus funciones están legalmente establecidas en el Art. 6° letra B del Código Tributario. Entre ellas está el absolver las consultas sobre la aplicación e interpretación de las normas tributarias; aplicar, rebajar o condonar las sanciones administrativas fijas o variables; condonar total o parcialmente los intereses penales por la mora en el pago de los impuestos en los casos expresamente autorizados por la ley y ordenar la publicación o la notificación por avisos de cualquiera clase de resoluciones o disposiciones de orden general o particular, entre otros.