A medida que la economía continúa recuperándose en el país, impulsando también el mercado laboral, la confianza de los consumidores sigue subiendo y en enero llegó a su mayor nivel desde mayo de 2018.
Así lo muestra el último Índice de Percepción del Consumidor (Ipeco), elaborado por el Centro de Estudios en Economía y Negocios de la Universidad del Desarrollo (UDD), el cual arroja que en enero la confianza de los consumidores tuvo un aumento de 41,2 puntos respecto al mismo mes de 2021, llegando a 112,2 puntos (en índice con base 100 en 2001), gracias a la fuerte mejora de la visión sobre la situación económica y el mercado laboral actual y también futura.
En relación a diciembre, el índice registró un alza de 5,3 puntos, con incrementos también en las visiones sobre la situación futura, pero bajas en los componentes coyunturales.
El nivel del Ipeco se enmarca en la fuerte recuperación económica que ha experimentado el país este año, además de los mejores datos del mercado laboral, con una constante generación de puestos de trabajo, aunque aún quedan por recuperarse cerca de 350 mil empleos respecto a los que habían previo a la crisis, o 660 mil si se quiere llegar a un nivel de cobertura similar a esa época, pero considerando el aumento de la población. Las noticias económicas vigentes durante el mes fueron mayormente positivas para la confianza de los consumidores. El Imacec de noviembre aumentó un 14,3% en doce meses. Por otro lado, el Índice de Actividad del Comercio (IAC) subió 16,7% en diciembre, con lo que tuvo un alza de 12,9% en doce meses. No obstante, las noticias por el lado de la inflación fueron adversas, con el IPC de diciembre aumentando un 0,8%, con lo que acumula un crecimiento de 7,2% en doce meses.
Y, entre los factores que determinan los ingresos de los hogares, la tasa de desempleo retrocedió a 7,2% en el trimestre terminado en diciembre, mientras que el Índice Real de Remuneraciones de noviembre aumentó un 0,2% durante el mes, acumulando un retroceso de 0,9% en un año.
Detalles del indicador
De acuerdo al informe, respecto del mes inmediatamente anterior, la percepción del presente cayó 6,8 puntos, hasta 150,8 puntos. Sin embargo, es el segundo nivel más alto desde abril de 2018, dando cuenta de que la confianza en la actualidad sigue siendo positiva.
El retroceso mensual del indicador coyuntural se debió a bajas en los dos elementos del indicador coyuntural. La percepción de la situación económica actual anotó una baja de 3,6 (hasta 115,1), pasando de levemente optimista a neutral, de acuerdo a los niveles del sondeo. Por otra parte, la percepción del desempleo actual tuvo una caída de 13,6 puntos en relación a diciembre, con lo que llegó a una marca de 228,9 puntos, desde optimista a moderadamente optimista.
En tanto, el Índice de Expectativas aumentó 9,6 puntos respecto a diciembre, hasta 98,4 puntos, su nivel más alto desde agosto de 2018. Su indicador sobre la percepción de la situación económica futura subió 13,7 puntos (hasta 90,6), pasando de pesimista a moderadamente pesimista. Mientras, la percepción del desempleo futuro cayó 6 puntos (a 134,6), quedando en moderadamente optimista.
Finalmente, la percepción de los ingresos futuros aumentó 15,6 puntos (a 82,9), pasado de muy pesimista a moderadamente pesimista. Esto, en un contexto de percepción de mayor inflación hacia adelante, el término de ayudas como el IFE universal y las dudas sobre los efectos en la economía de las nuevas variantes del coronavirus.
Por estrato socioeconómico, todos los grupos mostraron caídas respecto de diciembre, salvo el ABC1, que subió 37,9 puntos, hasta 127,8, quedando en moderadamente optimista. Entre los que cayeron, la máxima baja se registró en el estrato E, de menores recursos, el que bajó hasta 82,3 puntos, convirtiéndose en el más pesimista de todos, luego de estar en el extremo opuesto el mes anterior.