Consejo constitucional aprueba indicaciones de expertos para el Banco Central y normas pasan al texto final

Todo volvió atrás. Este martes el pleno del Consejo Constitucional aprobó, de manera unánime, los cambios que realizó la Comisión Experta al texto que de este mismo había emanado, los cuales retrotrajeron todas las modificaciones que el Partido Republicano había propuesto para las normas del Banco Central (BC) en dicha instancia y que generó varias críticas de economistas. Con esto se cerró el capítulo del instituto emisor en la propuesta constitucional a votarse en diciembre, quedando ya su normativa en el texto final.

No te pierdas en Pulso

El Partido Republicano, que es mayoría en el Consejo Constitucional, había propuesto que el BC tuviera por objetivo velar por “la estabilidad de la moneda” y “no de los precios”, como se planteó desde los expertos. Eso volvió atrás.

Por su parte, que “el Banco Central ejercerá sus funciones y atribuciones buscando resguardar el cumplimiento de los objetivos a que se refiere el inciso 1 (estabilidad de los precios), sin perjuicio de que podrá considerar también los efectos de la política monetaria en la actividad económica y el empleo”, fue otra parte de la enmienda que se repuso tras la observación de la Comisión Experta y que ahora fue ratificado por el pleno. Los republicanos habían sacado esa última referencia a la “actividad económica y el empleo”.

Además, repusieron el inciso que permite al Banco Central poder comprar bonos o deuda del Estado en el mercado secundario de forma excepcional. Los republicanos no compartían dicha idea y en el Consejo Constitucional lograron borrar esta facultad con la que cuenta hoy el ente rector.

“Sin perjuicio de lo anterior, en situaciones excepcionales y transitorias, en las que así lo requiera la preservación del normal funcionamiento de los pagos internos y externos, el Banco Central podrá comprar durante un período determinado y vender, en el mercado secundario abierto, instrumentos de deuda emitidos por el Fisco, de conformidad a lo establecido en la ley institucional”, dice la enmienda que se repuso de cara a la presentación del texto final.

Eso sí, en la reposición, se agregó que dicha facultad necesitará tener el respaldo de cuatro de los cinco consejeros para su uso.

Finalmente, el último cambio fue respecto a las instancias donde el Banco Central debe rendir cuentas de su actuar. Originalmente el borrador hacía referencia a que dicho ejercicio era ante el Presidente de la República y al Congreso Nacional, pero ahora este último fue modificado por “al Presidente de la República y al Senado en la forma que determine la ley institucional”.

Cercanos a los consejeros del Partido Republicano indicaron que su apoyo, ahora, a tales cambios, se produjo principalmente por dos razones: la primera apunta a que consideran que si bien son precisiones, el texto aprobado en el pleno tiene algunas modificaciones respecto del texto inicial de los expertos, lo que de alguna manera los deja tranquilos con la redacción. Y la segunda tiene que ver con un factor más estratégico, en el sentido de que no todas las normas podían terminar en la comisión mixta.

El apoyo transversal de los comisionados respecto a las observaciones en relación al rol del Banco Central en la Constitución a plebiscitar a fin de este año, está en línea con las críticas que despertaron, en distintos sectores académicos y de expertos, las enmiendas que había introducido el Partido Republicano sobre la materia, en su momento, fundamentalmente la que le impedía comprar deuda del Estado.

Uno de ellos fue el expresidente del BC, Vittorio Corbo, quien afirmó que “me parece mal, porque le quita al BC una herramienta de uso excepcional en situaciones de severa tensión en los mercados de deuda”. Mientras el exvicepresidente del BC, Joaquín Vial, lo calificó de “un error grave. Esa facultad se legisló hace pocos años para dotar al BC de un instrumento para enfrentar situaciones excepcionales de riesgo para la estabilidad financiera, y no me cabe duda de que, si se mantiene la autonomía y profesionalismo del BC, ella va a ser bien usada”.

Actualmente, lo esencial del articulado referido al Banco Central en la Constitución vigente tiene características similares al texto que despachó el Consejo Constitucional. La Carta Magna de 1980 “consagra la autonomía, carácter técnico y patrimonio propio del Banco Central. Está compuesto por cinco consejeros designados por el Presidente, previa aprobación del Senado, y su objetivo está centrado en el control de precios. Ningún gasto público o préstamo podrá financiarse con créditos directos o indirectos del BC”, sostiene el texto.

Francisca Pérez, economista y directora en Plataforma Banco Central Autónomo, comentó que “la norma que se aprobó hoy en el pleno del Consejo es la propuesta por el Comité de Expertos, la cual nos deja satisfechos, luego de haber visto la posibilidad durante la semana antepasada de un retroceso en la autonomía del Banco Central, después que el pleno aprobara enmiendas que lo devolvían a 1989 y no tuvieran en cuenta los cambios que el BC tuvo de facto y de jure en estos más de 30 años”.