Tras seis meses de negociaciones, la estadounidense Mississippi Lime Company (MLC) puso fin a las tratativas que llevaba con los controladores de las chilena Cementos Bío Bío (CBB) para la compra del 100% de la compañía mediante una Oferta Pública de Adquisición de acciones (OPA), dejando la vía abierta para que la peruana Yura saque adelante su propuesta de compra por el 20% de la empresa. La decisión de la norteamericana deja abierta una serie de interrogantes respecto a las razones de su decisión, dado que podría haber seguido compitiendo con su oferta.
Esta determinación es un nuevo capítulo de una saga telenovelesca que ha caracterizado a los intentos de compra de Bío Bío. Estos partieron el pasado 13 de noviembre, cuando la peruana Yura, perteneciente al grupo Gloria de la familia Rodríguez Rodríguez, que controla el negocio del cemento en la zona sur de Perú, lanzó una OPA por 53 millones de acciones de CBB, equivalentes al 20,0590% de la propiedad, a un precio de $1.092,1 por acción. La propuesta de unos US$60 millones valorizaba a la empresa en total en unos US$300 millones. Esto le permitiría al grupo peruano elevar su participación hasta el 40%. Yura participa en CBB desde 2020, cuando adquirieron el 19,90% que tenían las hermanas Anita y Loreto Briones Goich. Sus hermanos Hernán y Pablo no quisieron desprenderse de su participación y se mantuvieron como controladores junto a sus históricos socios, las familias Rozas y Stein.
Sólo tres días después, el 18 de noviembre, el directorio de CBB reveló un hecho reservado donde se señalaba que el pasado 29 de mayo la mesa había sido informada de que la compañía norteamericana había presentado una carta de intención para una oferta no vinculante por la compañía a sus accionistas controladores, los Briones, Rozas y Stein, de US$1,89 por acción (aproximadamente $1.712 al dólar de ese momento), lo que la valuaba en casi US$500 millones, oferta que había expirado durante el año. Ante esto, al día siguiente se informó que el jueves 14 de noviembre MLC había presentado una nueva propuesta revisada a los controladores de CBB suscribiendo una nueva carta de intenciones no vinculante el día lunes de esa semana, que ahora valorizaba a CBB en US$400 millones, es decir, un 20% menos que la inicial en dólares y un 14% inferior en pesos. Esta eventual transacción estaba sujeta al due dilligence en curso, y a la negociación y ejecución de la documentación definitiva por parte de MLC y el grupo controlador de CBB.
Nueva oferta de Yura
Pasó casi una semana y el martes 26, Yura decidió dar el salto y elevar su propuesta, aunque sólo en precio. Ahora anunció que estaba dispuesta a pagar $1.450 por papel por el mismo 20,0590%, es decir, ofrecía del orden de US$80 millones por un quinto de la propiedad, lo que valorizaba a todo Cementos Bío Bío en US$400 millones aproximadamente.
Y pese a que la propuesta norteamericana era competitiva y era extensiva a todos los accionistas, dio por terminadas las conversaciones, mientras en la Bolsa de Comercio, la acción de Cementos, que tiene baja liquidez, cerró sin movimiento en $1.400.
“El día de hoy, los miembros del directorio de la sociedad han tomado conocimiento que los accionistas que forman parte del grupo controlador de la sociedad pusieron término a las conversaciones mantenidas con Mississippi Lime Company para una potencial compra de acciones de Cementos Bío Bío S.A.”, dijo el hecho esencial enviado a la Comisión para el Mercado Financiero (CMF) la tarde del jueves por la cementera y firmado por su presidente, Felipe Vial Claro, y su gerente general, Enrique Elsaca.
“Esta comunicación se efectúa en atención a que los miembros del directorio de la sociedad han considerado necesario que la totalidad de los accionistas y el mercado en general puedan contar con toda la información que pudiere ser relevante para sus decisiones de inversión y que los directores puedan ponderar los antecedentes necesarios para los efectos de remitir los referidos nuevos informes acerca de la mencionada nueva Oferta Pública de Adquisición de Acciones”, añadió el documento, que precisa además que esta información se entrega tomando en cuenta además de la modificación realizada por Yura a su oferta.
Los accionistas controladores de Cementos Bío Bío son los hermanos Hernán y Pablo Briones Goich, quienes hoy tienen el 41,81% a través de Inversiones Cementeras Limitada, que se agrupan con la familia Rozas Rodríguez, que a través de Inversiones La Tirana tienen un 11,9% y la familia Stein Von Unger, dueña de Normex S.A. e Inversiones Toledo, con 8,29%. El grupo peruano Gloria, a través de Yura, tiene el 19,90%.