Creación de nuevos puestos de trabajo se desacelera y casi el 60% de estos es informal

La primera lectura que se hace al mirar las cifras sobre desempleo es que la tasa de desempleo sigue una senda de reducción completando cinco meses de caídas consecutivas en su medición anual. Eso es lo que siguen mostrando los resultados de la Encuesta de Empleo que este miércoles el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) y que arrojó que la tasa de desocupación llegó a 8,7% en trimestre mayo – julio de 2024.

En este trimestre, la cifra significó un descenso de 0,1 pp. en doce meses, debido a que el alza de la fuerza de trabajo (2,4%) fue menor a la presentada por las personas ocupadas (2,5%). Por su parte, las personas desocupadas aumentaron 1,4%, incididas únicamente por quienes se encontraban cesantes (2,1%).

Sin embargo, al analizar más en profundidad las cifras el panorama no es del todo alentador. Por un lado, se siguen creando empleos y en el período informado se generaron 228.833 empleos lo que implica un alza de 2,5%, pero esta es la menor alza desde octubre del 2023. Por otro, del total del empleo creado en los últimos 12 meses, 130.745 fueron informales, es decir, el 57,1% de todos los nuevos puestos de trabajo. En tanto, 98.088 fueron formales, siendo este número el más bajo desde abril del 2021, lo que deja el peso de la creación de empleo a la informalidad.

“Por quinto trimestre consecutivo, la creación de empleo en términos interanuales fue impulsada en mayor medida por empleos informales”, subrayan desde Clapes-UC.

De esta manera, la tasa de ocupación informal se ubicó en 27,6%, con un alza de 0,7 pp. en un año y las personas ocupadas informales aumentaron 5,4%, incididas tanto por las mujeres (6,3%) como por los hombres (4,6%).

El análisis que muestra el grupo Security sostiene que “la creación de empleos se ha seguido moderando tanto en términos interanuales como en el mes desestacionalizado”. Y anticipan que “hacia adelante la ocupación debería seguir con un desempeño acotado, en línea con el desempeño de la actividad económica”. En este contexto, afirman que “la tasa de desempleo debiera continuar con una leve tendencia al alza ante una normalización de la fuerza de trabajo”.

Ingrid Jones, economista de LyD, puso el acento en que el mercado laboral sigue débil con una tasa de desempleo que, si bien es menor a la alcanzada en igual periodo del año anterior, sigue ubicada por sobre el 8%. “Lo más preocupante es que el crecimiento del empleo se sustenta en nuevos puestos de trabajo informales, lo que se traduce en empleos precarios, más inestables y con salarios más bajos. Es urgente retomar el camino del crecimiento económico e implementar medidas que permitan generar empleos formales”.

Otro dato que se refleja al analizar las cifras, es que la generación de nuevos puestos de trabajo por tercer trimestre consecutivo fue impulsada por el empleo público, que se expandió un 7,4% en comparación al mismo periodo de 2022, sumando casi 90 mil empleos y equivalen al 40% de todos los nuevos empleos asalariados en los últimos 12 meses. “La distinción por categorías muestra que los asalariados del sector público volvieron a impulsar la creación interanual de empleos. Así, cerca de dos tercios de los empleos que se crearon en términos interanuales fueron públicos o bien informales”, sostienen en Clapes UC.

Juan Bravo, director del OCEC-UDP afirma que la composición de la creación anual de empleo en el trimestre mayo-julio de 2024 muestra que, al igual que trimestres previos una importante alza de emprendimientos informales y una fuerte destrucción de emprendimientos formales sumado a la debilidad del empleo asalariado formal del sector privado”.

El economista pone otras cifras sobre la mesa para explicar la situación del mercado laboral: “El 57,1% de los empleos creados en el último año fue informal. Las cifras dan cuenta de que la creación de empleo asalariado formal en el sector privado continúa muy debilitada, mientras que el trabajo por cuenta propia informal registra un nuevo aumento, con un alza anual de más de 82 mil, y el trabajo por cuenta propia formal (el que corresponde a quienes registran su actividad ante el SII) exhibe una fuerte destrucción respecto al año previo, anotando una caída de poco más de 71 mil”.

Mientras que para Clapes-UC, “la debilidad de la creación de empleo asalariado formal en el sector privado es la consecuencia del bajo ritmo de crecimiento económico de la economía chilena. En la medida que el país no logre crecer a tasas más altas, seguiremos bajos ritmos de creación de empleo y el empleo precario continuará teniendo un peso relevante en la generación de puestos de trabajo”.

Otro dato clave es que, en términos desestacionalizados, se destruyeron 26.876 empleos respecto del trimestre inmediatamente anterior. Esta es la mayor destrucción de empleo ajustada por estacionalidad desde mayo de 2021, en plena pandemia.

Otros indicadores que mostró el INE es que en doce meses, el volumen de trabajo, medido a través del número total de horas efectivas trabajadas por las personas ocupadas, descendió 0,1%; mientras el promedio de horas trabajadas decreció 2,6%, llegando a 36,8 horas. Según sexo, el promedio de horas para los hombres fue 39,0 y para las mujeres, 33,9 horas.

En la Región Metropolitana, en tanto, el INE informó que la tasa de desocupación del trimestre mayo – julio de 2024, alcanzó un 8,8%, con un descenso de 0,5 pp. en doce meses. En el mismo período, la estimación del total de la población ocupada creció 2,3%, incidida, según sector económico, por comercio (5,9%), enseñanza (5,4%) y administración pública (7,3%).

Desde el gobierno, la ministra del Trabajo, Jeannette Jara, afirmó que “hemos tenido cinco meses consecutivos de mejores cifras, pero esto, sin duda, no termina acá, sabemos que hay un desafío importante porque hay muchas personas que han ingresado a la fuerza de trabajo y los puestos que se han ido creando han ido a una velocidad que ha sido un poco menor y esto se ha ido revirtiendo, pero todavía queda camino por andar, lo que se espera es que la economía siga creciendo, que las cifras se sigan manteniendo”.

De acuerdo al INE, por actividad económica, en doce meses, el ascenso de la población ocupada se explicó por comercio (3,3%), administración pública (5,7%) y enseñanza (4,0%). Los principales descensos se presentaron en industria manufacturera (-1,8%), actividades profesionales (-4,2%) y comunicaciones (-7,1%).

La gerenta de Estudios de la Cámara Nacional de Comercio (CNC), Bernardita Silva, analizó lo que está pasando en ese sector. “En el caso del sector comercio, que representa un 19,3% de los trabajadores del país, los ocupados alcanzaron a 1.802.325 personas en el trimestre móvil abril-junio 2024, registrando un alza anual de 3,7%, acelerándose frente al incremento del trimestre móvil anterior y donde el ocupado informal del sector creció 11% anual (60.500 informales más que hace un año), mientras que el ocupado formal marcó una baja de 1% anual, tercer período negativo”.

Así, destaca que “respecto al período previo, los ocupados marcan un alza de 1,3%. Se evidencia un incremento trimestral de 1,5% de los formales y un alza en el margen trimestral de 0,1% de los informales”.