El informe de la Cuentas Nacionales del Banco Central correspondiente al segundo trimestre de 2020 confirmó la delicada situación del país, pero al mismo tiempo un inquietante nivel de endeudamiento.
De acuerdo al emisor, la deuda externa de Chile se ubicó en US$208.108 millones (85,9% del PIB), lo que representa un aumento de 5,6% en relación al primer trimestre y 7,4% en comparación al mismo trimestre de 2019.
Del total de deuda externa, US$68.125 millones corresponden a pagos programados para los próximos 12 meses, siendo las empresas de inversión extranjera directa (IED) y los bancos, los principales deudores.
Por su parte, la cuenta corriente registró un superávit de US$1.154 millones, equivalente a 2,1% del PIB trimestral. Con ello, el saldo acumulado en un año equivale a un déficit de 1,8% del PIB.
Asimismo, al cierre del trimestre, la posición de inversión internacional neta redujo su saldo deudor, ubicándose este en US$39.497 millones (16,3% del PIB).
El resultado se explica por un incremento en el stock de activos, particularmente de los fondos de pensiones, asociado al buen rendimiento de las bolsas internacionales durante el período.